México, 17 de octubre. Durante su comparecencia en el Senado, el secretario de Economía, Marcelo Ebrard, escuchó una severa advertencia por parte del senador Mario Vázquez (PAN), quien acusó al gobierno federal de mantener al país en un estancamiento económico real.
Industria automotriz en contracción, productores rurales en desigualdad, crisis ganadera, falta de energía suficiente, infraestructura rezagada, PYMES sin acceso a crédito, desconexión con el sector académico y una creciente incertidumbre jurídica fueron los puntos críticos que el senador por Chihuahua enumeró para evidenciar lo que calificó como una economía en retroceso.
Como ejemplo del deterioro, Vázquez señaló la contracción severa en la industria automotriz:
- Caída del 34 % en la producción de vehículos pesados.
- Disminución cercana al 30 % en exportaciones.
- Ventas nacionales a la baja.
Cifras del INEGI, recordó, confirman que el país no solo se encuentra detenido, sino que va en retroceso estructural.
“En el campo priva la desigualdad, abandono y crisis ganadera. Lo mismo sucede a los productores de maíz, frijol, manzana y otros cultivos que no pueden competir frente a países que subsidian su producción y saturan el mercado mexicano”, dijo.
Además, apuntó a una crisis ganadera nacional por:
- El cierre de la frontera estadounidense por el gusano barrenador.
- La importación irregular y sin controles de carne y ganado desde Centro y Sudamérica.
- El ingreso irregular de ganado contaminado por la frontera sur.
- Todo esto, señaló, pone en riesgo la salud, la economía rural y la soberanía alimentaria.
Vázquez también criticó el rezago en infraestructura económica, como carreteras, puertos y aduanas, que impide el desarrollo logístico y reduce la competitividad nacional.
Denunció además que no hay suficiente energía limpia ni competitiva, lo que frena a la industria, al campo y al comercio.
En el mismo sentido, recordó que las PYMES, columna vertebral del empleo en México, carecen de acceso a crédito accesible, lo que limita su crecimiento y su integración a cadenas productivas y de exportación.
Señaló que la certeza jurídica está en riesgo. Y fue más allá al señalar que las reformas impulsadas por el gobierno —como la reforma judicial y los cambios a la Ley de Amparo— minan la confianza de los inversionistas y debilitan la certidumbre jurídica.
Alertó que, en el extranjero, México ya es percibido como un país con presencia dominante del crimen organizado y altos niveles de corrupción, lo cual ahuyenta inversión y agrava la crisis.
Para cerrar, Vázquez lanzó ocho preguntas puntuales a Ebrard —sobre el desplome de la industria automotriz, la desigualdad en el campo, la crisis ganadera, la falta de energía, el rezago en infraestructura, el abandono a las PYMES, la desconexión con el sector académico y la erosión de la certeza jurídica—.
“Estas no son preguntas retóricas, son exigencias legítimas de millones de mexicanos que viven las consecuencias del estancamiento”, sentenció.
Vázquez concluyó afirmando que la fortaleza del país está en quienes trabajan, invierten, producen, exportan e innovan. A ellos —dijo— el gobierno les debe respuestas claras y serias, no discursos vacíos ni improvisación.
Finalmente, llamó a generar una verdadera sinergia entre todos los niveles de gobierno para sacar a México del estancamiento y retomar un rumbo económico con visión, certeza y futuro.