México, 24 de julio. La Comisión Permanente del Congreso de la Unión solicitó a la Fiscalía General de Justicia de la Ciudad de México, a la Secretaría de Seguridad Ciudadana, al Sistema de Transporte Colectivo Metro y a la Dirección General del Metrobús, que refuercen las acciones de vigilancia, seguridad, atención e investigación sobre las agresiones conocidas como “pinchazos” en el Sistema de Transporte Público.
El dictamen aprobado señala que el exhorto obedece al aumento de denuncias ciudadanas por agresiones cometidas mediante objetos punzocortantes, conductas identificadas mediáticamente como “pinchazos”, principalmente en instalaciones del Metro de la Ciudad de México.
Dichos señalamientos parten del reconocimiento de una situación de alarma social, que demanda atención inmediata por parte de las autoridades en los ámbitos de seguridad pública, salud y procuración de justicia, sostiene el documento.
Refiere que el gobierno de la Ciudad de México ha atendido las denuncias a través de la Secretaría de Seguridad Ciudadana, al desplegar un operativo de gran escala que incluye a más de cinco mil 800 elementos, agentes encubiertos, binomios caninos, monitoreo en tiempo real y vigilancia reforzada en estaciones y vagones del STC Metro y el Metrobús.
Además de establecer también un protocolo integral de atención a víctimas, que incluye evaluación médica, toxicológica, psicológica y jurídica, en coordinación con el Escuadrón de Rescate y Urgencias Médicas (ERUM) y la Fiscalía General de Justicia.
El dictamen afirma que, si bien el gobierno local atiende el tema de los “pinchazos”, debido a la dimensión del problema, es necesario mantener la confianza ciudadana y la “obligación de garantizar” espacios seguros para todas las personas, por lo que es indispensable que dichas medidas no solo se mantengan, sino que se “refuercen, evalúen y mejoren de manera constante”.
Por lo que los legisladores estimaron pertinente exhortar a que se continúe con la aplicación de las acciones adoptadas, se refuercen de forma sistemática y se asegure su permanencia en el tiempo, especialmente bajo una perspectiva de género, derechos humanos y prevención de la violencia.