Ocuilan, Estado de México, 21 de agosto de 2025. — En un operativo de gran escala realizado en el municipio de Ocuilan, autoridades federales, estatales y ambientales realizaron inspecciones simultáneas en seis aserraderos, en una zona considerada como crítica por la intensa actividad de tala ilegal. La acción forma parte de las labores permanentes de combate a la deforestación clandestina y se enmarca en el Convenio de Coordinación para la Protección del Bosque de Agua.
Durante el despliegue, se aseguraron más de 50 metros cúbicos de madera, principalmente de oyamel y pino, así como maquinaria pesada utilizada para el procesamiento forestal y vehículos empleados para el traslado del material. El operativo fue resultado de trabajos de inteligencia y coordinación interinstitucional que han permitido identificar puntos de riesgo y reincidencia.
De los seis aserraderos inspeccionados, cuatro ya habían sido clausurados previamente por la Procuraduría Federal de Protección al Ambiente (Profepa) y asegurados por la Fiscalía General de la República (FGR). Uno más había sido inspeccionado anteriormente y el sexto fue detectado recientemente. En el aserradero número cinco, que operaba pese a una clausura anterior, personal de Profepa y elementos de la Policía Estatal fueron agredidos por civiles con piedras, lo que provocó daños a vehículos oficiales. Este incidente será denunciado ante las autoridades competentes.
En total, fueron aseguradas dos camionetas de 3.5 toneladas, una torre de aserrío con motor eléctrico, siete sierras cinta, cuatro rieles metálicos, un carro de empujón, dos bancos con motor para sierra de disco y tres ganchos michoacanos. La madera incautada será trasladada a instalaciones de la Comisión de Recursos Naturales y Desarrollo Rural de la Ciudad de México (CORENADR), donde permanecerá bajo resguardo.
El operativo contó con la participación de más de 700 servidores públicos, incluidos inspectores de la Profepa, elementos de la Secretaría de la Defensa Nacional, Guardia Nacional, Fiscalía General de la República, Fiscalía del Estado de México, Policía Estatal, autoridades ambientales de la Ciudad de México y personal de CORENADR. La acción es parte de una estrategia sostenida que busca frenar la tala clandestina y proteger los recursos naturales de una de las principales zonas de recarga hídrica del país.
La procuradora federal del medio ambiente, Mariana Boy Tamborrell, afirmó que esta operación reafirma el compromiso institucional de combatir el aprovechamiento ilegal de los recursos forestales mediante la aplicación de la ley y la coordinación entre autoridades. Destacó que la protección del Bosque de Agua es una prioridad ambiental y de seguridad para todo el centro del país.