Por unanimidad, el Pleno del Senado aprobó que los establecimientos que presten servicios de atención médica, público, privado o social, deberán registrar y notificar a las autoridades competentes cuando brinden servicios a niñas, niños y adolescentes que presenten signos de maltrato o cualquier modalidad de violencias.
La reforma a la Ley General de Salud establece que quienes presten servicio de atención médica deberán registrar y notificar al titular o responsable de la dirección del hospital, quien a su vez deberá dar aviso al Ministerio Público sobre el menor que presente lesiones y que presumiblemente se encuentren vinculadas a la comisión de hechos ilícitos.
El dictamen que se envió a la Cámara de Diputados señala que la violencia contra niñas, niños y adolescentes ocurre en ámbitos como el hogar, la escuela, la comunidad, las instituciones, el medio digital y, de manera transversal, por cuestiones de género.