YA HAY FINALISTAS PARA EL PREMIO KYBERNUS AL LIDERAZGO SOCIAL 2025

“Los grandes líderes deben ser capaces de reconocer y resolver problemas cuando las cosas van mal”.

Kybernus
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Una meta en común: la construcción de un país más próspero, libre e incluyente.

Hay quienes pese a no sentirse bien con su realidad se conforman; y otros que, insatisfechos, simplemente actúan: el Premio Kybernus al Liderazgo Social reconoce y promueve el esfuerzo de los segundos, personas que toman el control de sus vidas e impactan de manera positiva en sus comunidades.

Siguiendo la máxima del empresario Ricardo Salinas Pliego, quien afirma que “los grandes líderes deben ser capaces de reconocer y resolver problemas cuando las cosas van mal”, el programa de liderazgos juveniles del Centro Ricardo B. Salinas Pliego se caracteriza por premiar a jóvenes en todo el país que encabezan múltiples causas, como la incorporación del lenguaje de señas en los servicios públicos, la promoción de la educación en la niñez indígena, la valorización del oficio del agricultor y más.

En la sexta edición del galardón 18 jóvenes son los finalistas que pasaron a la siguiente ronda de selección, en la que se decidirán los tres primeros lugares, que recibirán 50 mil, 40 mil y 30 mil pesos, respectivamente.

Talentos

Cada uno de los seleccionados postuló al reconocimiento hace algunos meses, describiendo cuáles son sus causas, la situación o hecho que los motivó a emprenderlas y —más importante todavía— qué acciones realizan para cambiar su entorno con liderazgo e innovación.

Los proyectos ganadores de esta edición muestran que los jóvenes —contrario a lo que se piensa— están muy interesados en modificar para bien el rumbo de sus comunidades. Sus campos de acción son diversos y van desde cómo solucionar el rezago educativo en el país, hasta la creación de tecnologías que hagan más simple la vida diaria.

Una de las materias en las que han puesto manos a la obra es la economía. Como el caso de Vianey Laureano —la contadora de los emprendedores—, presidenta de Hey Conta!, una empresa que brinda servicios contables y hasta la fecha ha impulsado el crecimiento de más de mil empresas emergentes, especialmente de Guerrero, de donde es originaria.

También está el caso de Arturo Portillo, quien fundó en México la Federation for Economic Education, que promueve el emprendimiento juvenil capacitando a cientos de jóvenes en doce países.

Hay también proyectos dedicados a crear conciencia ambiental. Susana Duarte, de Sonora, fundó por ejemplo Recolección Punto Norte, una empresa cleantech que transforma residuos peligrosos como el aceite automotriz o sólidos contaminados en energía limpia.

A su vez, Gabriela Rosas promueve a través de Green Up prácticas sostenibles entre productores locales de Villa del Carbón para la creación de huertos urbanos, apiarios, reutilización de residuos y elaboración de cosméticos naturales.

Mientras, María Beltrán fundó Creative Lab Food, una consultoría en gestión alimentaria que desarrolla comida a partir de subproductos agroindustriales y productos regionales. El Bioshake, por poner un ejemplo, es una bebida simbiótica infantil creada para prevenir la obesidad. “Mi propósito es claro: combatir el desperdicio alimentario y mejorar los hábitos nutricionales desde la niñez”, menciona.

Y en un contexto donde es mejor que la tecnología sea nuestra aliada Elena Olazarán, con apenas 19 años, creó el robot Ixitlón, un asistente médico virtual impulsado por Inteligencia Artificial (IA) que diagnostica hasta 21 enfermedades con base en una serie de preguntas y que funciona sin internet, lo que permite que llegue a comunidades remotas y marginadas.

Por su lado, Rodolfo Nájera, coach del equipo olímpico mexicano de informática, promueve la inclusión tecnológica y enseña programación, ciberseguridad, e IA a miles de estudiantes.

Con el mismo ánimo de enseñanza Marino Chávez fundó Sci-Kid Club, un proyecto de divulgación científica que ha llegado a más de cinco mil jóvenes en toda América Latina mediante su enfoque frugal; un método que lleva a los niños por todo el método científico generando sus propias preguntas y conclusiones a través de la experimentación.

Trabajar para otros

Entre las propuestas hubo además varios proyectos con un marcado carácter social y espíritu de servicio. Raúl Contreras fundó Becando tus sueños IAP, un programa para que los internos del penal de Almoloya de Juárez puedan reinsertarse a la comunidad a través de talleres certificados y proyectos que promueven el autoempleo.

Motivada por fortalecer el sentido de comunidad, Andrea Cruz fundó PumaDrive, una plataforma de transporte compartido al estilo Uber, pero diseñada para estudiantes de Ciudad Universitaria de la UNAM. Hasta el momento cuenta con más de 300 mil beneficiarios con rutas seguras.

Alan Vigueras, por su lado, fundó Trayecto 3 AC, que a través de la formulación de protocolos, capacitaciones, modelos sicojurídicos y programas comunitarios ha protegido a casi seis mil niñas, niños y adolescentes contra el acoso y el maltrato escolar.

Y también en búsqueda de una mejor convivencia Alejandra Reynoso fundó el Instituto para la Construcción de la Paz AC, un proyecto que ha fortalecido la cohesión comunitaria mediante espacios de diálogo y formación de redes colaborativas en lo local y nacional.

Con el mismo cariz de trabajar para ayudar a los demás, otro asunto que sumó varias propuestas fue la educación. Julieta Hernández fundó Happen, proyecto que da educación financiera a más de dos mil mujeres guanajuatenses como vía para construir su autonomía y erradicar la violencia. “Soy hija de mamá soltera y sé todo lo que mi mamá sufrió para sacarme adelante. Con este centro apoyo a las mujeres que como ella tuvieron que hacerlo solas”, asegura.

Ganadores Kybernus 2024

Con una línea similar Fátima Gaytán fundó CONCORA, una plataforma de educación virtual que conecta a los usuarios con oportunidades personalizadas de aprendizaje como becas, trabajos, voluntariados y otras experiencias formativas. “Buscamos que nadie tenga que dejar pasar una oportunidad por falta de preparación o acceso”, dice la joven.

Paola Salmún, creadora de Fundación UNETE, promueve iniciativas a nivel nacional y colaboraciones entre la sociedad civil, el gobierno y la iniciativa privada para equipar miles de aulas en escuelas públicas y reducir así la brecha digital.

Yahir Morelos, a través de Yolchikawak —“corazón fuerte”, en náhuatl—, fortalece el desarrollo físico, emocional y social de niños en comunidades rurales de alta marginación. Hasta el momento ha capacitado a 800 educadores, beneficiando a más de cinco mil niños.

Y también a favor del desarrollo de la infancia Jazmín Chí fundó el Grupo Educativo CHI, una red global que crea programas y materiales editoriales para niños que proceden de contextos de migración, violencia y vulnerabilidad con un enfoque educativo distinto: “Quiero que lo que aprendan sirva para la vida real”, puntualiza.

Mientras, Argelia Mariscal fundó el Museo San Antonio (MUSA), donde se expone el trabajo de artistas emergentes del estado de Oaxaca y que proporciona formación literaria, musical y en artes plásticas a tres mil niños y adolescentes.

En las próximas semanas los seleccionados se reunirán en la Ciudad de México para conocerse, discutir sobre sus proyectos y decidir cuáles merecen el primer, segundo y tercer lugar. “Es una experiencia muy intensa convivir con tus compañeros y que sean ellos quienes te elijan”, dice a Vértigo Floretta Mayerson, la ganadora del primer lugar del año pasado por crear un chatbot que ofrece atención terapéutica a cientos de mujeres.

Una vez elegidos los jóvenes participarán en un evento exclusivo en las instalaciones de TV Azteca, en el que Ricardo Salinas Pliego entregará los últimos premios y aconsejará a los jóvenes para llevar sus proyectos más lejos.

¡Enhorabuena, Kybernus!

Un paso adelante

Para el Centro Ricardo B. Salinas Pliego y Kybernus los buenos liderazgos son aquellos que inspiran con su ejemplo y motivan a los demás a generar grandes cambios.

Por ello crearon el Premio Kybernus al Liderazgo Social, para reconocer y visibilizar a las personas que con sus ideas innovadoras y acciones concretas transforman sus comunidades de manera positiva y muestran la importancia de la libertad para la construcción de un México más próspero e incluyente.

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