Ante la necesidad de recuperar la vida diaria, el trabajo y las actividades productivas el país reinició sus labores de forma paulatina a partir del 1 de junio con la reapertura de las industrias minera, automotriz y de la construcción, con las cuales se dará un fuerte impulso al desarrollo de amplias regiones del territorio nacional afectadas por la paralización de la mayor parte de las labores por la pandemia de Covid-19.
La reincorporación a la nueva realidad requiere además que los proyectos continúen para beneficio de las comunidades que más lo necesitan.
De ahí que el banderazo de salida para el arranque de las obras del Tren Maya en Quintana Roo, Yucatán, Campeche y Chiapas por parte del presidente Andrés Manuel López Obrador representa un ejemplo del impulso decisivo que requiere la economía ya que traerá oportunidades de desarrollo y bienestar a millones de habitantes de la región por la creación de miles de empleos.
El mandatario mexicano afirmó que el regreso a la cotidianidad —con la observancia de medidas de higiene y de sana distancia— es importante porque mejorará no únicamente la economía nacional sino también la popular y la familiar.
Destacó que en los cinco tramos de la construcción del Tren Maya se crearán tan solo en el presente año 80 mil trabajos directos, mientras que en 2021, cuando se encuentre la obra en toda su capacidad, se estima que los empleos ascenderán a 150 mil.
“Esto ayudará mucho, sobre todo luego de esta crisis económica auspiciada por la pandemia de coronavirus que ha llevado al desempleo en esta región y en todo el país”, resaltó.
Frente a un escenario en el que se pronostica una fuerte recesión y la pérdida de más de un millón de empleos, así como el cierre de micro y pequeños negocios, principalmente, es urgente para México regresar al movimiento productivo, donde obras como el Tren Maya apoyarán de manera determinante las acciones para alcanzar una rápida recuperación económica.
Hacia delante
Al reanudar sus giras de trabajo el 1 de junio, 44 días después de suspenderlas por la pandemia de Covid-19, el presidente López Obrador se dirigió al sudeste del país en un recorrido por carretera de casi 25 horas para encabezar el arranque de las obras del Tren Maya a lo largo de cinco días.
En el inicio de su recorrido en Quintana Roo destacó que con la gira comenzó una etapa nueva en la vida pública del país para ir hacia la nueva normalidad, porque es lo que necesitan la economía nacional y el bienestar del pueblo.
Luego de recordar que ese 1 de junio se cumplió un año y medio del inicio de su gobierno dijo sentirse satisfecho con lo alcanzado: “A pesar de la adversidad, a pesar de los pesares, sigue avanzando la transformación de nuestro país”.
Añadió que decidió comenzar sus nuevos recorridos por el sudeste para dar los banderazos para el inicio de la construcción del Tren Maya en beneficio de la población de la región.
Manifestó la tristeza que causa la pérdida de vidas humanas y dio el pésame a todos los familiares de las víctimas, pues dijo que es bastante el dolor que genera una pandemia como la actual “pero tenemos que ir hacia delante y tenemos que salir, como siempre ha salido el pueblo de México, con su fortaleza cultural y social”.
El presidente explicó que los cuatro tramos del Tren Maya que iniciaron labores son de Palenque a Escárcega, de Escárcega a Campeche, de Campeche a Mérida y de Mérida a Cancún que representarían alrededor de mil kilómetros de vías férreas.
Al precisar que el quinto tramo, de Cancún a Tulum, se licitará el presente mes, el mandatario destacó que en conjunto los cinco tramos generarán un número importante de empleos de manera directa: 80 mil en el presente año y alcanzarían los 154 mil en su fase más intensiva en 2021.
El titular del Ejecutivo federal informó que los contratos autorizados para el Tren Maya ascienden a 90 mil millones de pesos, por lo que será la inversión pública más importante que se haya hecho en muchos años en el sudeste, obra que calificó de primer orden, trascendente e histórica al integrar a toda esa región maya.
Dijo que el tren comunicará a las antiguas ciudades mayas con las ciudades coloniales y modernas de la región ya que está concebido para reivindicar una zona que no fue atendida durante muchos años.
Reactivar la economía
En Yucatán el presidente López Obrador dio el banderazo de salida para el inicio de las obras que iniciarán en Izamal y hasta los límites con Campeche, en Calkiní, donde destacó la importancia de los trabajos ya que llegan en un buen momento porque ante la pandemia de coronavirus se requiere relanzar la productividad.
“La mejor forma de reactivar la economía y hacerlo pronto está en la industria de la construcción, que tiene un efecto multiplicador: se hacen las obras públicas, en este caso las vías para el tren, y se generan empleos, se reactiva la economía regional. Por eso es muy importante esta obra”, agregó.
Señaló que aparte del tren hay otras acciones de apoyo, como el programa Sembrando vida, con el que se benefician ejidatarios, comuneros y pequeños propietarios para cultivar sus tierras y al mismo tiempo que producen alimentos siembren árboles frutales y maderables, todo con cuidado del medio ambiente.
El primer mandatario destacó que en los municipios por donde pasará el Tren Maya se prevén programas de mejoramiento urbano, créditos para mejoría, ampliación y construcción de vivienda, además de optimizar los servicios públicos.
“De modo que no es solo una obra, no solo es el Tren Maya: es una importante obra acompañada de otras acciones para el bienestar de los habitantes del sudeste de México”, recalcó.
El presidente indicó que en el mismo trazo por el que se construyó el antiguo tren del sudeste se construirá la nueva vía para un tren moderno, un tren de carga, un tren de pasajeros y un tren turístico.
Externó su confianza en que el país saldrá adelante de la crisis derivada de la pandemia de coronavirus, en la que afirmó que “ya tocamos fondo en lo que tiene que ver con la crisis económica y vamos a la recuperación”.
No a la inmovilidad
En Escárcega, Campeche, el mandatario destacó la necesidad de potenciar una región que cuenta con una riqueza cultural de primer orden y que en lo económico, aparte de mover carga para el sudeste, permitirá aprovechar la afluencia turística que llega a Cancún, de alrededor de diez millones de visitantes.
“Este tren tiene mucho futuro en el corto y en el mediano plazo. Su construcción significará la oportunidad de dar muchos empleos, porque se generarán puestos de trabajo en la construcción”, apuntó.
Comentó que “a pesar de los pesares tenemos que ir hacia la nueva normalidad, que significa reabrir las actividades económicas, sociales, culturales, reiniciar los trabajos de la industria de la construcción, empezar a trabajar… Porque no podemos quedarnos todo el tiempo en la inmovilidad. Tenemos, con cuidado, con responsabilidad, que ir hacia delante poco a poco”.
En Palenque, Chiapas, también dio el banderazo para el inicio de los trabajos del Tren Maya y recordó que en la entidad, como parte del programa Sembrando vida, se cultivan 200 mil hectáreas de árboles maderables, como cedro y caoba, labor en la que participan 80 mil campesinos, ejidatarios y pequeños propietarios.
Refirió que este tramo tendrá una inversión de poco más de 15 mil millones de pesos, los cuales estarán dispuestos porque se tienen finanzas públicas sanas ya que a pesar de la crisis se ha mantenido la recaudación con números positivos: de enero a mayo se logró incrementar la recaudación de impuestos en más de 70 mil millones de pesos en comparación con el mismo periodo del año pasado.
INTERTEXTOS
“El regreso a la cotidianidad es importante porque mejorará no solo la economía nacional sino también la popular y la familiar”.
“A pesar de la adversidad, a pesar de los pesares, sigue avanzando la transformación de nuestro país”.
RECUADRO
Recuperación difícil
El Instituto para el Desarrollo Industrial y el Crecimiento Económico (IDIC) aseguró que México vive la peor crisis desde hace 88 años, lo que significa desempleo y quiebra de empresas.
Por lo tanto, aseveró el IDIC, la recuperación económica del país no será rápida ni llegará antes de 2021.
El embajador y consejero del IDIC Francisco Suárez Dávila discrepó de la opinión de la SHCP en el sentido de que la recuperación de la economía será en forma rápida pero asimétrica: advirtió que si la política económica actual no se corrige se corre el riesgo de tener la peor caída desde la Gran Depresión, puesto que simplemente el Banco de México prevé una contracción del PIB de 8.8% para todo 2020.
Apoyos a Mipymes
La Cámara Nacional de la Industria de Transformación (Canacintra) solicitó apoyos para las Micro, pequeñas y medianas empresas que requieren financiamiento para subsistir.
Aseguró que los empresarios no quieren que les regalen ni que los condonen ya que están convencidos de que unidos con el gobierno saldrán adelante de esta crisis.
Recordó que ahora tres de las 15 empresas mayormente deudoras han pagado a la autoridad fiscal 17 mil 538 millones de pesos y solicitó que se destinen mejores líneas de crédito, útiles y congruentes, que asciendan hasta 250 mil pesos para que las pequeñas empresas puedan en este momento reactivar su economía.
Pidió que se establezcan tasas de interés bajas, con trámites sencillos y pagaderos de uno a tres años, con un periodo de gracia que permita empezar a pagar a partir del mes de octubre.
Además sugirió que a la par de la transparente y eficaz aplicación del recurso se revisen las prórrogas de servicios, como el pago de energía eléctrica, para aquellas empresas y familias que pasan por tiempos de gran dificultad para sobrevivir.
Por su lado, el Banco de México destacó que para remontar los efectos de la crisis por la pandemia se requiere reforzar la microeconomía interna.
En el país hay poco más de cuatro millones de microempresas que son fundamentales para un número importante de familias ya que aportan alrededor de 40% del empleo total.