Algunas investigaciones sugieren que muchos animales poseen pautas morales, pueden sentir emociones como el amor, el dolor, la indignación y la empatía. Los animales tienen un sentido de indignación cuando los códigos sociales son violados.
Los chimpancés pueden castigar a integrantes de su manada por violar ciertas normas del orden social. Otros primates han mostrado que tienen un instinto de justicia.

La tolerancia, el perdón, la reciprocidad y la justicia, son claramente visibles en la forma igualitaria con la que los lobos y los coyotes juegan unos con otros. Se rigen por un código estricto de conducta cuando juegan.

Los perros son capaces de analizar las habilidades de sus compañeros de juego y de fingir que están en desventaja para mantener una situación de igualdad.

Esos ejemplos sugieren que los animales tienen un sentido del bien y del mal. Algunos investigadores sugieren que el núcleo de la moralidad está en las emociones y a los animales les resulta fácil interactuar de esa manera
Fuente: www.ted.com