Migraciones climáticas

México, particularmente vulnerable por contar con once mil 200 kilómetros de litorales, debe prepararse ante el impacto de fenómenos meteorológicos cada vez más extremos y frecuentes a causa del cambio climático.

México debe prepararse ante el impacto de fenómenos meteorológicos cada vez más extremos y frecuentes
Foto: Creative Commons
Martha Mejía
Política
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En 2010, más de 42 millones de personas en todo el planeta se vieron obligadas a dejar sus lugares de origen como consecuencia de catástrofes naturales, principalmente inundaciones y sequías: ante el incremento en la intensidad de los fenómenos meteorológicos, la comunidad científica concuerda en que esto es consecuencia del cambio climático.

Por ello resulta cada vez más urgente establecer acuerdos internacionales para poder enfrentar las necesidades que en los próximos 40 años requerirán casi 200 millones de refugiados ambientales que, de acuerdo con la Organización Internacional de Migración (OIM), tendrán que reubicarse por cuestiones climáticas.

“México debe prepararse ante el impacto de fenómenos meteorológicos cada vez más extremos y frecuentes a causa del cambio climático”, advierte el premio Nobel de Química 1995, Mario Molina.

Al participar en el seminario Migración humana y cambio climático el científico mexicano reconoce a los ciclones Ingrid y Manuel, que provocaron la muerte de 110 personas y dejaron un millón 200 mil damnificados a su paso por México, como ejemplo de lo que puede suceder ante el aumento en la intensidad de los huracanes.

El ingeniero químico señala que estos no son eventos que en particular hayan sido causados por el cambio climático sino fenómenos que hubieran ocurrido de todas maneras, pero cuya intensidad “sí es muy probable que haya aumentado por el cambio climático”.

El especialista dice que los efectos negativos del calentamiento global se han analizado durante muchos años, “aunque todavía hay personas que dudan de las afirmaciones comprobadas sobre sus efectos en la sociedad y en la movilidad social”.

Molina explica que las inundaciones recientes en México, así como las que se han presentado en otras partes del planeta, son efecto de un cambio en la temperatura de la superficie de la Tierra y en esto se debe trabajar en los próximos años, “porque no es un fenómeno para el futuro sino que afecta a las actuales generaciones”.

Lo preocupante, añade, es que en unas cuantas décadas podría haber cambios todavía más alarmantes y catastróficos: “No es que sea lo más probable, y no lo podemos predecir con tanta certidumbre, pero es un riesgo real”.

Predicción

El secretario de Medio Ambiente, Juan José Guerra, comenta por su parte que los científicos —entre ellos Mario Molina— señalan que es muy probable que la intensidad con la que se han estado presentando estos fenómenos esté relacionada con el cambio climático, como consecuencia de la actividad humana.

Guerra Abud dice que si bien hay instituciones que advierten sobre la formación de los meteoros, estos son fenómenos que tienen una variación minuto a minuto y hay que estar monitoreando de manera permanente.

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