En el último año, más de 5,000 migrantes duranguenses regresaron a esa entidad, provenientes de Estados Unidos, por el endurecimiento de las leyes migratorias y falta de trabajo.
Ahora buscan recuperar su estabilidad emocional y económica, ante la frustración de no ver cumplido su sueño americano.
La directora de Asuntos Internacionales y Atención a Migrantes del estado, María Elena Castaños Castaños informó que mensualmente llegan al estado alrededor de 550 migrantes, a través del programa de repatriación que maneja el Instituto Nacional de Migración (INM).
La delegada federal de INM, Rebeca García Corral informó que 647 extranjeros tienen residencia en Durango, entre los cuales predominan los de países como Estados Unidos, España y Guatemala.
De esta población extranjera, algunos tienen varias ocupaciones, son casados con mexicanos o mexicanas y además tienen varias profesiones.
Informó que se retuvieron a 10 niños de nacionalidad extranjera, que intentaban cruzar a Estados Unidos, sin estar acompañados de sus padres.
Fueron regresados a su países de origen, por conducto de los funcionarios de Protección a la Infancia del instituto, la mayoría centroamericanos y de Estados Unidos.
Informó que cerca de 10,000 paisanos vendrán a Durango durante la temporada vacacional, por lo que desde el inicio del operativo “Paisano” se observa movilidad de turistas extranjeros en la entidad.