Una jueza federal revocó la ley de Arizona de 2005 sobre contrabando de inmigrantes, debido a que es privativa de los estatutos federales.
El fallo emitido el viernes por la jueza Susan Bolton es un paso más en una serie de restricciones aplicadas por la justicia federal ante el intento de Arizona por involucrar a la policía local en la lucha contra los inmigrantes sin residencia legal.
Bolton falló que la ley estatal priva a las autoridades federales de su derecho exclusivo a procesar los delitos de contrabando humano.
La ley de Arizona fue aprobada por los legisladores en respuesta a la frustración de los votantes por la situación del estado en momentos en que era el centro del contrabando de inmigrantes. Fue la segunda ley de inmigración importante de Arizona, a la que siguió en 2010 una más amplia que obligaba a la policía a determinar el estatus inmigratorio en determinados casos, inspirando leyes similares en Alabama, Georgia, Indiana, Carolina del Sur y Utah.
La ley fue aplicada con frecuencia por el jefe de policía del condado de Maricopa, Joe Arpaio, aunque los tribunales han limitado sus poderes antiinmigratorios en los últimos 17 meses.
La ley fue objeto de fuertes críticas luego que más de 2,000 inmigrantes que pagaron para que los introdujeran subrepticiamente en el país fueron acusados de asociación ilícita para ingresar ilegalmente.
Los detractores dicen que la ley apunta a los contrabandistas, no a sus clientes.

