La ministra Margarita Beatriz Luna Ramos fue electa por unanimidad como presidenta de la Comisión de Género y Acceso a la Justicia de la Cumbre Judicial Iberoamericana para el periodo 2016-2018.
La elección se realizó durante la Primera Reunión de la Comisión, que se desarrolla en la sede de la Suprema Corte de Justicia de la Nación (SCJN) y donde la ministra Luna Ramos se comprometió a aportar su convicción de juzgadora y de mujer, así como su experiencia, creatividad, trabajo y esfuerzo en la lucha por la conquista de la igualdad.
En su mensaje al asumir el cargo recordó que ya se cumplieron tres lustros desde que se plantearon en la Cumbre Judicial Iberoamericana las primeras acciones para promover políticas de igualdad de género y la creación de estructuras para su implementación.
Dichas acciones quedaron plasmadas por vez primera en los acuerdos contenidos en la Declaración de Canarias, derivada de la Sexta Cumbre Iberoamericana, en 2001, y desde entonces se han realizado múltiples esfuerzos en esa tarea, precisó.
“Se ha alcanzado el reconocimiento de la necesidad de introducir la perspectiva de género en la política institucional de los poderes judiciales de los países de la región y en su quehacer jurisdiccional”, destacó.
La ministra Luna Ramos consideró que están sentadas las bases para transitar hacia nuevas estrategias y enfocar los esfuerzos hacia la manera en que se está cumpliendo con el imperativo de introducir la perspectiva de género en las sentencias judiciales en cada uno de los tribunales que integran la Cumbre Judicial Iberoamericana; detectar aciertos y posibles desaciertos, una labor de revisión y de eventual depuración hacia la excelencia judicial.
“En la institucionalización de la perspectiva de género en los poderes judiciales es prioritaria la capacitación, como el camino para acceder a mejores oportunidades. Cualquier acción afirmativa, para constituir un auténtico espectro de cambio, debe estar acompañada de la necesaria preparación en niveles de excelencia”, señaló.
Reiteró que el estudio constante es la vía más sólida y directa para la conquista de nuevos espacios en el ámbito profesional.
“Las mujeres requieren de armas para su mejor desempeño, para progresar y salir adelante y para vencer la desigualdad, la preparación se constituye en la mejor herramienta”, dijo.