El pasado sábado la alcaldesa de Monterrey, Margarita Alicia Arellanes Cervantes, le ‘entregó’ la ciudad a Jesucristo en un evento llamado “Monterrey Ora”.
En su discurso Arellanes criticó a quienes se escandalizan por hablar de estos temas y destacó que el estado presentaba mejorías como resultado de haber abierto las puertas a Dios.
El público gritó eufóricamente ¡Cristo vive, Cristo vive!