México, Ciudad de México, 3 de julio. El presidente Andrés Manuel López Obrador afirmó que la Policía Federal “estaba echada a perder” y por eso las resistencias a su transformación, aunque negó que vaya a haber despidos o que sus elementos vayan a ser transferidos por la fuerza a la Guardia Nacional.
“A la Policía Federal decirle que no se va a despedir a nadie, van a tener sus mismos sueldos, sus mismas prestaciones, no se va a obligar a nadie a que pase a otra corporación”, aseguró en su conferencia de prensa matutina, luego que esta mañana un grupo de policías federales se manifestó en Iztapalapa.
“Entiendo que hay también resistencias porque es un cambio, lo cierto es que estaba echada a perder esa corporación (...), estaban malacostumbrados algunos y por eso la protesta, pero no se estaban portando bien, sobretodo los de arriba”, aseguró el Ejecutivo federal.
López Obrador mencionó que es voluntario el trabajo que se realiza para que los elementos de la Policía Federal pasen a formar parte de la Guardia Nacional y, si reúnen los requisitos, pueden pertenecer a ese cuerpo de seguridad público.
En caso contrario, “de todas maneras no van a ser despedidos porque hay otras tareas que se van a seguir llevando a cabo desde la Secretaría de Seguridad Pública”.
Reiteró que la admiración pasada llegó a contratar hasta 50 mil elementos de la Policía Federal para cuidar a funcionarios e instalaciones, “eran mucho más de los que cuidaban a la gente”.
Aclaró que esos contratos se han ido eliminando de manera paulatina y desmintió que se les hayan reducido sus sueldos o que vayan a ser despedidos.
Respeto
Por otra parte, luego de que con la aprobación de la Ley Federal de Austeridad Republicana resurgió el tema de la llamada partida secreta, el presidente López Obrador rechazó que vaya a manejar esos recursos y pidió no ser comparado con ex mandatarios mexicanos como Carlos Salinas de Gortari.
“No puedo decirlo, pero no me comparen, no somos lo mismo, respeten por favor”, expresó en conferencia de prensa en la que se le cuestionó sobre lo establecido en el Artículo 61 de la citada ley, de que el Ejecutivo federal decidirá el destino del ahorro generado por la austeridad.
López Obrador sostuvo que él no manejará ninguna partida secreta pues será la Secretaría de Hacienda la responsable del manejo de todos los recursos públicos y de informar al respecto, y afirmó que ya hay mecanismos de control que tienen que ver con la Secretaría de la Función Pública y los reportes al Congreso.