El presidente Enrique Peña Nieto aclaró que la reforma financiera que este miércoles se presentó no es una reforma fiscal, sino que es un instrumento que contribuiría a que las familias mexicanas incrementen sus recursos y que la Banca de Desarrollo otorgue créditos más baratos.
Ante los dirigentes de los partidos firmantes del Pacto por México reunidos en el alcázar del Castillo de Chapultepec, detalló algunos de los propósitos fundamentales de la enmienda, entre ellos, fomentar y ampliar el crédito barato y reducir las tasas de interés.