El Senado de la República levantó la voz en defensa de los jóvenes mexicanos que radican en Estados Unidos ante la decisión del gobierno de ese país de dar por terminado el Programa Acción Diferida para los Llegados en la Infancia (DACA, por sus siglas en inglés), que durante cinco años ha reconocido el valor de sus aportaciones como personas, estudiantes y contribuyentes.
En un pronunciamiento al que le dio lectura el presidente de la Mesa Directiva, Ernesto Cordero Arroyo, la Cámara de Senadores hizo un llamado a sus contrapartes en el Congreso estadunidense para que este sea el momento que conduzca hacia una verdadera solución legislativa que proteja a este importante sector de la población.
Además, exhortó al Poder Ejecutivo Federal para que, a través de la Secretaría de Relaciones Exteriores, de la embajada de México en Washington y de las 50 representaciones consulares en los Estados Unidos de América, se redoblen los esfuerzos de asistencia y protección consular a favor de nuestros jóvenes.
El Pleno también solicitó a la Secretaría de Gobernación a que articule la estrategia necesaria para facilitar el retorno de nuestros connacionales, su plena integración y desarrollo en México.