Mariano Rajoy, el presidente del gobierno español en funciones, aceptó este martes la propuesta del rey Felipe VI de optar a la reelección en los próximos días, tras comprobar que dispone de apoyo para conseguirlo.
Rajoy compareció ante la prensa tras dialogar con el rey, que cerró con él dos días de encuentros con líderes políticos para proponer un candidato a la jefatura del Ejecutivo.
El líder del Partido Popular (centroderecha) ya intentó sin éxito ser reelegido en el debate que tuvo lugar entre el 30 de agosto y el 2 de septiembre, pero ahora no solo cuenta con el apoyo de los liberales sino con la abstención de los socialistas, lo que le permitirá renovar su mandato este fin de semana por el Parlamento.
Agradeció al PSOE la decisión de abstenerse, una posición que le parece “razonable y responsable: hoy celebro que ese entendimiento sea posible aunque sea de forma limitada”, destacó el líder conservador, que tendrá que gobernar en minoría.
“Tengo la obligación de gobernar, necesito apoyos y tendré que ganármelos”, dijo el líder del Partido Popular, que ha garantizado la formación de un Ejecutivo “capaz, estable y duradero”, tras una etapa “sin precedentes” en la historia española, con un gobierno en funciones durante casi un año.
Esta situación ha supuesto para España una parálisis legislativa y “multitud de problemas demorados”, agregó.
Rajoy, quien aseguró que no tiene perfilado su nuevo gabinete, confió en que con la nueva legislatura se abra un periodo basado “no en maximalismos sino en diálogo y entendimiento”.
El jefe del Ejecutivo español en funciones valoró el “acuerdo clarísimo y rotundo” de los partidos para evitar terceras elecciones, algo que de por sí ya trae “consecuencias muy positivas para España”, puntualizó.