Un banco de Texas aceptó pagar 700,000 dólares para responder a las acusaciones de que discriminó a los acreedores hispanos, mediante el cobro de altos intereses en los préstamos sin garantía, informaron este miércoles fuentes oficiales.
El Texas Champion Bank, en la comunidad de Alice, en el sureste de Texas, se comprometió ante el Departamento de Justicia de Estados Unidos a distribuir ese dinero entre unos 2,000 clientes hispanos que gestionaron créditos con la institución.
El Departamento de Justicia informó que el banco pagará un promedio de 350 dólares a cada uno de estos clientes.
El banco también acordó monitorear sus préstamos para que no se den futuras disparidades, a capacitar a sus empleados y revisar sus políticas para asegurar que los intereses no se fijen de manera discriminatoria.
“Felicitamos al Texas Champion Bank por cooperar con el Departamento de Justicia para llegar a una resolución adecuada de este caso”, dijo el subprocurador general Thomas Pérez, en un comunicado.
El Departamento de Justicia comenzó a investigar a la institución bancaria en 2010, luego de que esta fuera reportada por la Corporación Federal de Seguros de Depósitos.