Las Fuerzas Armadas Revolucionarias de Colombia (FARC) y el gobierno de ese país firmaron un acuerdo parcial para llevar a los rebeldes a tener participación política por primera vez en 5 décadas, una vez que abandonen el uso de las armas.
El convenio sobre participación política constituye la primera vez en que las FARC acceden, al menos en papel, a dejar las armas que tomaron en 1964.
La mesa de negociaciones entre ambas partes está radicada en Cuba, con Noruega, Chile y Venezuela como acompañantes en el proceso de paz.
‘La firma e implementación del acuerdo final contribuirá a la ampliación y profundización de la democracia, en cuanto implicará la dejación de las armas y proscripción de la violencia política para todos los colombianos”, expresaron las partes en un comunicado.
Sin embargo, una dejación total de las armas depende de que las 2 partes negocien el resto de su agenda, de la cual solo llevan un acuerdo parcial sobre política agraria y este segundo sobre participación política.