La policía danesa ya no tratará de detener inmigrantes y refugiados de tránsito por el país que buscan llegar a Suecia y otros países nórdicos, dijo el jueves el jefe de la policía.
La decisión pone en evidencia cómo los países de la Unión Europea tratan de cumplir las normas bajo las cuales las personas que huyen de la guerra y la persecución pueden solicitar asilo en el primer país de la UE de que entren.
La decisión danesa llega en medio de una oleada de inmigrantes y refugiados que llegan de Alemania y que no desean solicitar asilo en Dinamarca.
Autoridades danesas inicialmente insistieron en que debían registrarse en Dinamarca, pero dieron marcha atrás el miércoles después de un enfrentamiento con cientos de inmigrantes que reclamaban el derecho de cruzar el país.
El primer ministro Lars Loekke Rasmussen dio su “pleno apoyo” a la decisión de la policía después de informar los partidos políticos en la “situación extraordinaria”.
Dijo que al menos 3,200 inmigrantes han entrado en Dinamarca desde el domingo y cerca de 668 personas han solicitado asilo.