El gobierno del presidente Rafael Correa disolvió el principal gremio de profesores dependientes del estado, Unión Nacional de Educadores (UNE), aduciendo que no cumple sus propios estatutos y reglamentos acerca de organizaciones sociales.
La resolución fue adoptada por el ministerio de Educación, que nombró a una comisión liquidadora de la UNE, fundada en 1950.
Las observaciones realizadas por el ministerio de Educación indicaron que el gremio de profesores no había registrado a la directiva de la UNE, entre otros incumplimientos de la ley.
La presidenta de esa organización, Rosana Palacios, señaló que “un grupo de abogados se encuentra reunido para impugnar esta disposición, que muestra la decisión del gobernante de perseguir y amenazar a la UNE, el gremio tiene legitimidad”, dijo.
La Unión Nacional de Educadores ha mostrado estrecha relación con el partido Unidad Popular, una agrupación de izquierda radical.
Correa, quien se identifica como un socialista del siglo XXI, empezó su gestión en enero del 2007 y debe terminar su labor en mayo del 2017.