La mexicana Sandra Ávila Beltrán, alias la “Reina del Pacífico”, fue trasladada del Centro de Detención Federal de Miami a una prisión de tránsito tras cumplir una sentencia por facilitar dinero a un narcotraficante.
El abogado Stephen Ralls dijo que su clienta fue enviada al Moore Haven Correctional Facility en el Condado Glades, “un centro de espera mientras la transportan a donde tiene que llegar”.
Ávila Beltrán, de 52 años de edad, será deportada próximamente a México.
El abogado explicó con anterioridad que el procedimiento señala que las autoridades migratorias la tomen en custodia para su posterior deportación.
Ávila Beltrán terminó su sentencia el domingo 28 de julio, tras haber cumplido la mayoría de su condena en México, cuyas autoridades la deportaron en agosto del año pasado para que enfrentara a la justicia estadunidense.

La mujer se declaró culpable en abril pasado del delito de asistencia económica a un narcotraficante convicto ante el tribunal de Miami. La declaración formó parte de un acuerdo con las autoridades judiciales estadunidenses.
La llamada “Reina del Pacífico” aceptó en ese momento haber brindado “asesoría” a su exnovio, el colombiano Juan Diego Espinosa Ramírez, alias “El Tigre”, considerado uno de los enlaces más importantes del mexicano cártel de Sinaloa con el del Norte del Valle, con sede en Colombia.
Con el acuerdo, Ávila Beltrán evitó ir a un juicio en el que hubiera tenido que enfrentar el cargo de asociación ilícita para importar y distribuir cocaína en Estados Unidos y una pena mayor en caso de ser hallada culpable.