Hoy la oposición al gobierno del presidente Nicolás Maduro se concentra en las calles de Caracas para exigir celeridad en la convocatoria de un referéndum revocatorio del actual mandato.
La movilización antigubernamental más importante de los últimos años — encabezada por la Mesa de la Unidad Democrática (MUD)— y que se denomina la Toma de Caracas, fue convocada para las 8 de la mañana para salir de diferentes puntos de la ciudad capital de Venezuela.
Los accesos a Caracas han sido militarizados y se impide el paso de vehículos y de personas que quieren unirse a estas manifestaciones, quienes se muestran esperanzados en que estas marchas aceleren la salida de Nicolás Maduro del poder.
“Asistimos a la marcha para ver si tenemos democracia y convocan el referendo revocatorio porque aquí hay mucha hambre, miseria, hacemos un llamado a la sensatez del gobierno”, señaló a Caracol Radio una de las asistentes a la marcha.
Las horas previas a la protesta, organizada por la Mesa de la Unidad Democrática y que pretende colmar tres importantes avenidas de la capital venezolana con manifestantes provenientes de todo el país, se han sucedido en medio de una fuerte tensión.
El gobierno ha demorado la entrada a Caracas con retenes militares y vehículos accidentados en un esfuerzo por restarle impacto a la manifestación.
Varios dirigentes de Voluntad Popular, la formación de Leopoldo López, han sido detenidos y se ha reportado la deportación de varios equipos de reporteros que intentaban cubrir el desarrollo de la marcha.
El Ejecutivo alienta la especie de que sus adversarios preparan un golpe de Estado.
Por su parte, en la Plaza Venezuela se concentrarán los chavistas para marchar hacia el Palacio de Miraflores donde serán recibidos por Nicolás Maduro.