Recientemente se difundió la homosexualidad de algunos jugadores profesionales, en deportes como basquetbol, futbol americano y ahora en el futbol soccer.
Esta es la historia de Marcus Urban, futbolista alemán que participó en más de 100 partidos con el equipo mayor del Rot-Weiss, en la segunda división de Alemania.
Tras ser testigo de los insultos dirigidos a los homosexuales por parte de la audiencia y dentro de la misma cancha, Urban decidió renunciar.
En 1991 sólo tenía 20 años y se retiró, pero sabía que si no lo hacía seguiría sufriendo en una doble realidad que consumía la mitad de su energía y sabía que en ese entonces no existía ningún jugador gay.
Cuando por fin confesó su homosexualidad se sintió muy contento de poder ser él mismo y no tener que fingir nada más, lo cual le brindó mayor autoestima y confianza.
Urban relató su vida en el libro Hidden Player: The story of a gay footballer, y actualmente es entrenador personal y consultor sobre diversidad sexual.
“Ahora juego con un equipo de fútbol gay y estoy muy contento”, declaró el alemán.
Con información de CNN.