La Comisión Económica para América Latina y el Caribe (CEPAL) resaltó que es necesario diseñar e implementar políticas públicas integrales desde una perspectiva de género y de derechos para responder a la pandemia del COVID-19 en el corto, mediano y largo plazo.
Alicia Bárcena, máxima autoridad del organismo regional de las Naciones Unidas, participó este miércoles 8 de abril en la Reunión informativa entre las Ministras y altas autoridades de los Mecanismos para el Adelanto de las Mujeres de América Latina y el Caribe: La respuesta a la crisis de la pandemia COVID-19 desde la perspectiva de género, que se realizó de manera virtual bajo la organización de la CEPAL y la Entidad de las Naciones Unidas para la Igualdad de Género y el Empoderamiento de las Mujeres (ONU-Mujeres), y en la cual estuvieron presentes representantes de 29 países de la región: 14 de América Latina y 15 del Caribe.
La actividad contó con la participación especial de María-Noel Vaeza, Directora Regional para las Américas y el Caribe de ONU-Mujeres, y Carolina Cuevas, Ministra de la Mujer y la Equidad de Género del Gobierno de Chile, en su calidad de Presidenta de la Mesa Directiva de la Conferencia Regional sobre la Mujer de América Latina y el Caribe.
Los principales objetivos del encuentro fueron analizar los distintos escenarios económicos y sociales de la crisis actual y su impacto diferenciado en las mujeres en el corto, mediano y largo plazo; intercambiar información en torno a las principales iniciativas que los gobiernos de la región están llevando adelante, teniendo en especial consideración las necesidades de las mujeres y las desigualdades de género en el marco de la crisis actual; y promover iniciativas de cooperación regional, subregional y bilateral que permitan una respuesta coordinada a la crisis del coronavirus, incorporando lecciones aprendidas de la región y otras partes del mundo.
En su presentación ante las ministras y autoridades, Alicia Bárcena recalcó que la pandemia de la enfermedad por coronavirus ha puesto de relieve las desigualdades entre hombres y mujeres, pero también ha cristalizado la importancia de los cuidados para la sostenibilidad de la vida. “Es clave hoy reflexionar y actuar sobre la poca visibilidad que tienen los cuidados y las diversas actividades de las mujeres en las economías de la región. Urge pensar las respuestas a las necesidades de la población desde un enfoque de género”, enfatizó.
En la reunión, Alicia Bárcena invitó a las autoridades a pensar cómo las medidas que se están tomando en los Estados de la región afectan los nudos estructurales de la desigualdad de género planteados en la Estrategia de Montevideo para la Implementación de la Agenda Regional de Género en el Marco del Desarrollo Sostenible hacia 2030: “Esto es, cómo lo que se planifique e implemente en este escenario de crisis no agudice aquellos fenómenos de desigualdad e injusticia que durante tanto tiempo trabajamos para revertir. Hemos avanzado muchísimo en acuerdos y compromisos que conforman nuestra Agenda Regional de Género y hace un par de meses los gobiernos adoptaron el Compromiso de Santiago (en la XIV Conferencia Regional sobre la Mujer de América Latina y el Caribe, realizada en enero), dando un importante paso más hacia el logro de la igualdad de género”, indicó.