Una comisión investigadora de la ONU dijo que encontró evidencia de limpieza étnica contra musulmanes en la República Centroafricana, pero que no podía probar que haya ocurrido genocidio.
El informe final de la comisión, dado a conocer este 8 de enero, establece además que aunque la cifra reportada de muertes oscila entre 3,000 y 6,000, esos números son una “subestimación radical” de las personas muertas en los atroces combates que continúan entre cristianos y musulmanes en esa nación.
La pesquisa del panel de 3 miembros acusa a ambas partes de crímenes de guerra y crímenes contra la humanidad, pero acusa a la milicia cristiana anti Balaka de depuración étnica contra los musulmanes.