El Papa Francisco sostuvo este sábado una audiencia privada con la canciller federal de Alemania, Ángela Merkel, que duró unos 46 minutos, todo un récord para un encuentro entre un pontífice y un jefe de gobierno.
La reunión tuvo lugar en la biblioteca personal del líder católico, ubicada en el segundo piso del Palacio Apostólico del Vaticano, y contaron con la ayuda de un intérprete.
En un comunicado, la sala de prensa del Vaticano calificó de “cordial” el encuentro, en el que ambos analizaron temas de interés común, como la situación socio-política, económica y religiosa en Europa y en el mundo.
“En particular se habló de la protección de los derechos humanos, de las persecuciones contra los cristianos, de la libertad religiosa y de la colaboración internacional para la promoción de la paz”, indicó el texto.
La canciller alemana le obsequió a Francisco 107 discos del compositor y director alemán Wilhelm Furtwangler. Al entregarle el presente al Papa le comentó: “no sé si usted tenga tiempo para escucharlos”.