El líder conservador del Partido Popular, Mariano Rajoy, será reelegido este sábado presidente del gobierno español después que el PSOE le garantizara el jueves la abstención, pero queda la incógnita de saber cuántos socialistas votarán “no”, dado el debate interno que viven en el partido.
No obstante, el Partido Socialista Obrero Español (PSOE) solo se ha comprometido a abstenerse en la investidura y anuncia una clara oposición a Rajoy durante la legislatura.
El jefe del gobierno en funciones y candidato a la reelección trasladó a sus ministros que si el Ejecutivo logró en los últimos años superar los problemas económicos existentes en 2011, también puede superar las dificultades políticas que se auguran en la nueva legislatura, expresó la vicepresidenta en funciones, Soraya Sáenz de Santamaría, tras la reunión del gabinete.
El PSOE, principal grupo de la oposición y tradicional alternativa de gobierno al PP, decidió abstenerse en la elección de Rajoy para desbloquear la situación política y evitar la convocatoria de unos terceros comicios, que según todas las encuestas le supondrían una pérdida de apoyos.
Esta decisión ha causado un fuerte debate tanto en el partido como entre los parlamentarios y se especula con que en torno de una quincena de ellos votarán “no” mañana, desobedeciendo la disciplina del grupo.
Pero entre todos, el foco estará en Pedro Sánchez, líder del PSOE hasta su dimisión el pasado 1 de octubre por oponerse a dicha abstención e insistir en que “no es no”, como habían dicho desde las elecciones de diciembre pasado.
Sánchez no develó qué votará mañana y respondió con un escueto “lo veréis” a las preguntas de los periodistas.