Para la cancillería española la masiva marcha opositora del jueves en Caracas ilustra la “urgencia” de que se celebre “este año” un referendo sobre la revocación del presidente Nicolás Maduro.
En un comunicado, este viernes, la diplomacia española estimó que la Toma de Caracas, donde según la oposición se manifestó más de un millón de personas, demuestra “el apoyo popular a la vía del revocatorio” exigido por los detractores de Maduro.
El gobierno español, que mantiene una relación tensa con el ejecutivo de Maduro, ya se pronunció en ocasiones anteriores a favor de la celebración de ese referendo.
“El gobierno considera que esta jornada debe constituir un nuevo impulso para un muy necesario diálogo entre el gobierno y la oposición”, que lleve a una auténtica reconciliación y la liberación de “presos políticos”, añade el texto.
El ministerio indica que la manifestación evidencia “la urgencia de que el Consejo Nacional Electoral (CNE) adopte las medidas necesarias para que se celebre este año” dicho referendo.
A la oposición venezolana le urge que el referendo se efectúe antes del 10 de enero de 2017 porque si Maduro pierde, habrá elecciones; pero si es revocado después de esa fecha, será sustituido por su vicepresidente.
La exigencia viene apoyada por la Mesa de Unidad Democrática (MUD), la coalición de partidos mayoritaria en la Asamblea Nacional que considera necesario un cambio de gobierno para atajar la grave crisis que atraviesa el país.
Golpeada por la caída de los precios del petróleo, fuente de 96% de sus ingresos en divisas, Venezuela sufre una escasez de alimentos y medicinas de 80% y una inflación que el Fondo Monetario Internacional proyecta en 720% para este año.