Un nuevo terremoto de magnitud 7.3 sacudió una remota zona montañosa de Nepal matando al menos 70 personas, además de provocar deslaves y derribar edificios.
Este es el segundo terremoto que sufre Nepal en menos de 3 semanas después de que el país quedó devastado por el peor sismo registrado en décadas.
Se esperan un aumento en el número de víctimas mortales.
Laxmi Dhakal, funcionario del Ministerio del Interior de Nepal, confirmó que hasta el momento hay más de 2,000 heridos.
El aeropuerto internacional de Katmandú, que se ha transformado en un centro para canalizar la ayuda internacional, se cerró temporalmente el martes, mientras que el tráfico rugía en las calles de la capital.

