Entre gritos de “fraude, fraude, fraude” y zafarranchos se realizó la Asamblea Nacional del PAN, donde se aprobó reformar los estatutos y se decidió que la miltancia será quien elija a su nuevo dirigente.
Tras ser votado el proyecto de armonización, delegados de distintos estados inconformes con el resultado se acercaron a la mesa directiva y forcejearon con elementos de seguridad, mientras que otros simplemente abandonaron la asamblea.
Por su parte, la senadora Gabriela Cuevas dijo haber sido golpeada por elementos de seguridad.


