Diversos factores del entorno urbano influyen en el nivel de actividad física de los mexicanos, como el patrón de las calles (conectividad), la seguridad, la presencia de parques y ciclovías, la densidad poblacional, la entropía y los aspectos estéticos, entre otros, de ahí que únicamente 14 por ciento de las personas cumple con las recomendaciones internacionales de actividad física.
Deborah Salvo Domínguez, experta en Nutrición y Ciencias de los Alimentos de la Universidad Iberoamericana, explicó lo anterior durante el Seminario Entornos urbanos, caminabilidad y actividad física, organizado por los Departamentos de Salud y Arquitectura de dicho centro de estudios.
De acuerdo con el Estudio Internacional de Actividad Física y Entornos Urbanos IPEN (International Physical Activity and the Environmental Network), realizado en la ciudad de Cuernavaca, Morelos, explicó que la desigualdad es uno de los factores que impiden el desarrollo de una mayor caminabilidad en México, por lo que al desarrollarse nuevos entornos se deben considerar tres puntos: Implementar el aspecto salud en la planeación de nuevas zonas urbanas; rediseñar las ciudades para favorecer al peatón y a la actividad física y utilizar espacios disponibles que modifiquen de manera temporal la caminabilidad del sitio en ciertos días y horarios.
El estudio IPEN se ha realizado en 17 ciudades de 12 países, con el fin de estimar de manera precisa la asociación de varias características del entorno urbano con los niveles de actividad física de adultos. En México, Salvo Domínguez fue una de las dos investigadoras principales del estudio.