Riesgo de muerte súbita en pacientes con estenosis aórtica

 Falta de aire, dolor de pecho o desmayos repentinos.

Muerte súbita
Foto: Belchonock
Lorena Ríos
Todo menos politica
Compartir

México, 28 de febrero.- La incidencia de muerte súbita en pacientes con estenosis aórtica, un estrechamiento de la válvula que reduce u obstruye el flujo sanguíneo del corazón hacia el resto del cuerpo, oscila entre 5 y 34%, con mayor impacto en casos con sintomatología previa, por lo que resulta importante ofrecer alternativas de tratamiento a la población que se ve afectada por esta enfermedad.

Con síntomas como falta de aire, dolor de pecho o desmayos repentinos en su forma más severa, la estenosis aórtica afecta por lo regular a personas mayores de 70 años de edad —aunque se puede presentar desde los 50— en quienes se presenta acúmulo de calcio y colesterol, lo que se traduce en degeneración y envejecimiento del sistema cardiovascular.

Se trata de una enfermedad crónico-degenerativa de la válvula aorta, en la que el orificio de salida de toda la sangre del corazón es menor a un centímetro cuadrado. Por su carácter progresivo, esta afección representa un riesgo de muerte: a los dos años de la aparición de los síntomas la supervivencia es de 50%, en tanto que a los cinco años se reduce a 20%.

Anteriormente, el abordaje de esta enfermedad se realizaba mediante una cirugía que implicaba abrir el pecho, parar el corazón y colocar una válvula aórtica con el apoyo de un corazón artificial gigante, lo que hoy ha sido sustituido por un procedimiento de aproximadamente 20 minutos, con el paciente en conversación con los médicos, una recuperación que por lo general le permite regresar al otro día a su casa.

“Desde hace tres años, a partir de la implementación de la válvula aórtica supra anular autoexpandible con liberación superior-a-inferior para corazón, los médicos mexicanos con especialidades en cardiología y cardiocirugía están en posibilidades de aprovechar los recientes avances tecnológicos de la terapia valvular percutánea, lo que ha contribuido a reducir la incidencia de muerte súbita cardíaca y a mejorar la expectativa y calidad de vida de los pacientes”, señala José Alfredo Merino Rajme, Director del Centro Médico Nacional 20 de noviembre, especialista en cardiología clínica y en cardiología intervencionista.

Gracias a la labor de especialistas de instituciones como el Instituto Mexicano del Seguro Social (IMSS), el Instituto de Seguridad y Servicios Sociales de los Trabajadores del Estado (ISSSTE), el Instituto Nacional de Cardiología y el Hospital Central Militar, México se posiciona en América Latina como un país líder en la adopción de esta terapia, así como en la formación de recursos humanos en el ámbito de las terapias valvulares de vanguardia.

Del 28 de febrero al 2 de marzo, en la ciudad de Guadalajara, Jalisco, expertos en cardiología e intervención vascular de México y el mundo se darán cita en el Congreso Anual de Cardiología Internacional, para abordar los más recientes avances en materia de cardiología clínica, cirugía cardiovascular, ecocardiografía y otros temas.