A fin de disminuir gravedad de enfermedades y las condiciones adversas en diversos cultivos, investigadores del Departamento de Horticultura de la Universidad Autónoma Agraria Antonio Narro (UAAAN) estudian los mecanismos de defensa en plantas.
Estas utilizan una compleja red de reacciones metabólicas para dar respuesta a los estímulos ambientales y se enfrentan a condiciones desfavorables conocidas como estrés y afectan su metabolismo, crecimiento y desarrollo.
Se trata de un receptor que detecta los estímulos y que permite percibir y enviar señales al núcleo para responder. Dentro de las moléculas que pueden ser detectadas por los receptores, destacan los elicitores, que son compuestos con la capacidad de inducir los mecanismos defensivos de las plantas.
Susana González Morales del Consejo Nacional de Ciencia y Tecnología (Conacyt) señaló que los mecanismos de defensa consisten en inducir que la planta (en este caso, tomate bajo estrés biótico y abiótico) pueda hacer algunos cambios a nivel morfológico, bioquímico.
Incluso de algunos componentes que le servirán para defenderse de estrés biótico (algunas enfermedades derivadas de microorganismos, hongos, bacterias, entre otros), indicó la científica comisionada al Departamento de Horticultura de la UAAAN.
También la planta formula una respuesta de defensa ante condiciones de estrés abiótico (sequía, deficiencia de nutrientes, alta salinidad en condiciones de riesgo y alta radiación), añadió la especialista.
González Morales comentó que se puede aplicar la inducción de defensa a todo tipo de plantas como frutales, cereales, entre otras, y no solo a hortalizas. Incluso la información genética se puede utilizar para crear variedades de plantas resistentes a cierto tipo de plagas o patógenos.
Resaltó que “algunos de estos proyectos los estamos trabajando con la iniciativa privada, ya que actualmente se pueden encontrar algunos productos comerciales que se recomiendan para la inducción de defensa en plantas”, indicó.