Científicos españoles crearon una bioimpresora 3D capaz de crear por primera vez piel humana totalmente funcional y apta para ser trasplantada a pacientes o usada para la investigación y prueba de productos cosméticos y farmacéuticos.
Los resultados de la investigación pionera fueron publicados por la revista científica Biofabrication y difundidos por el Centro de Investigaciones Energéticas, Medioambientales y Tecnológicas (CIEMAT) y la Universidad Carlos III de Madrid (UC3M).
“Es la primera vez que se logra crear piel humana con componentes humanos, totalmente funcional y apta para ser trasplantada a pacientes o sometida a testeos industriales”, señaló José Luis Jorcano, jefe de la Unidad Mixta CIEMAT/UC3M.
De acuerdo con el investigador, el funcionamiento de la bioimpresora se resume: “En lugar de tintas de colores utilizamos componentes biológicos como células, proteínas o factores de crecimiento necesarios para crear tejidos. Esas ‘biotintas’ son precisamente la clave de la bioimpresión 3D”.
Según Jorcano, en el mercado existen otras bioimpresoras, pero los investigadores españoles crearon ahora las biotintas necesarias para fabricar piel, además del software y el hardware que las combinan.
El equipo trabaja en la fabricación de piel desde años antes de que aparecieran las primeras impresoras 3D.
Jorcano ve el inicio de un largo camino que seguirá con la fabricación de otros tipos de piel y seguirá con tejidos de menor complejidad.
“El final al que todos aspiramos es poder imprimir en algún momento órganos humanos complejos, como un corazón, un riñón o un hígado”, dijo.