Joan Rivers dejó a su hija Melissa a cargo de su fortuna, valuada en 150 millones de dólares y pidió que se destinara a algunas organizaciones de beneficencia.
De acuerdo con un testamento de Rivers de 2014 , que fue presentado ante el Tribunal Testamentario de Nueva York, la fallecida comediante nombró a su hija Melissa Rivers como albacea de su patrimonio.
Las organizaciones a las que Joan dejó parte de su fortuna son:
- Perros Guías para Ciegos
- Jewish Guild Healthcare
- Fundación de la Fibrosis Quística.
- Comedor caritativo de Nueva York God’s Love We Deliver
- Centro Simon Wiesenthal
- Fundación Jewish Home and Hospital de Manhattan.
Rivers murió el 4 de septiembre a los 81 años por un daño cerebral por falta de oxígeno.