Una corte de Seúl, capital de Corea del Sur, ordenó este jueves la aplicación de la “castración química” contra un hombre preso por pederastría.
Este tratamiento hormonal, que suprime el impulso sexual por 3 años, es la primera vez que se aplica como condena en ese país.
Pyo, de 31 años de edad, complementa su sentencia con 15 años de prisión por haber sostenido relaciones sexuales con 5 adolescentes que contactó a través de un servicio de chat por teléfono celular.
El sentenciado fue diagnosticado con un desorden del deseo sexual tras un exámen médico solicitado por la fiscalía, lo que llevó a la corte del distrito sur de Seúl a ordenar el tratamiento, informó este jueves la agencia Yonhap.
El tratamiento hormonal, conocido de manera coloquial como “castración química”, fue incluido en una ley aprobada en julio de 2011 para convictos mayores de 19 años de edad que estén en riesgo de repetir su conducta con menores de 16 años de edad.
En su veredicto el juez Kim Ki-young hizo notar que los crímenes de Pyo fueron cometidos por mucho tiempo, y se evaluó que tiene un deseo sexual excesivo, que le hace imposible controlarlo por sí mismo.
Además, se ordenó que tras su liberación porte un brazalete electrónico durante 20 años.
De acuerdo al veredicto, el tratamiento hormonal será administrado 2 meses antes de que sea liberado.
Corea del Sur es el primer país asiático en aprobar esta medida, que existe en Alemania, Dinamarca, Polonia, Suecia y California, en Estados Unidos.
Así funciona la castración química: