Una nueva cepa de una infección estomacal potencialmente peligrosa se ha extendido por el mundo y está plagando Estados Unidos, advirtieron las autoridades de salud pública.
Investigadores advirtieron que algunos infectados con esta nueva cepa podrían no ser capaces de resistir sus efectos.
La nueva cepa ha enfermado gente en Japón, Europa Occidental y otras partes del mundo. Fue identificada el año pasado en Australia y se le conoce como “cepa de Sydney”.
Desde septiembre, más de 140 brotes en Estados Unidos han sido causados por la “cepa Sydney” de norovirus.
En Estados Unidos, representa un 60% de los brotes de norovirus, según un informe difundido el jueves por los Centros para el Control y Prevención de las Enfermedades.
El norovirus —otrora conocido como virus de Norwalk— es altamente contagioso y suele propagarse en escuelas, cruceros navales y guarderías. Se atribuyó a la nueva cepa un brote en el buque Queen Mary II el mes pasado durante un crucero por el Caribe.
El virus causa vómitos y diarrea durante algunos días.
Ian Goodfellow, un prominente investigador en la Universidad de Cambridge, en Inglaterra, califica el norovirus como “la Ferrari de los virus” por la velocidad a la que se propaga por un grupo grande de personas.
Se propaga por medio de cocineros o quienes manipulan alimentos y no se lavan bien las manos después de ir al baño. Pero al contrario que la salmonela y otras enfermedades alimenticias, el norovirus también puede propagarse por el aire, por medio de gotitas que saltan cuando una persona enferma vomita.
Cada año, los norovirus causan unos 21 millones de infecciones y 800 muertos, dijeron los Centros.
Para los infectados no hay un remedio específico. Deben aguantarse durante uno o 2 días de los síntomas más severos y precaverse de la deshidratación, dicen los expertos.