La Cruzada Nacional contra el Hambre es una estrategia de 6 años que prevé modificar las condiciones de vida e indicadores de las familias más pobres del país, afirmó la titular de la Secretaría de Desarrollo Social (Sedesol), Rosario Robles Berlanga.
Al presidir la Sesión Ordinaria de Trabajo del Consejo Nacional de la Cruzada Nacional Contra el Hambre, Robles Berlanga explicó que se trabajará de manera responsable e institucional para responder a las necesidades en cada uno de los estados y municipios.
Solo así se verán resultados en las condiciones de vida de 7.4 millones de mexicanos, de 400 municipios en extrema pobreza y carencia alimentaria, al tiempo de modificar las condiciones e indicadores de la calidad de vida, precisó en un comunicado.
Indicó que lo que se desea es que la población vulnerable “pueda acceder a un piso básico de derechos, consagrados en la Constitución, en materia de alimentación, salud, educación, vivienda, servicios de la vivienda e ingresos”.
Resaltó que la dependencia a su cargo trabaja en la construcción de una coordinación institucional que no existía hace algunos meses ya que faltaba coordinación en los diferentes órdenes de gobierno.
En cumplimiento a lo acordado en el Pacto por México, no se llevarán a cabo, en este momento, acciones de la cruzada en los 14 estados que tendrán elecciones, ello para evitar cualquier sesgo partidista, añadió.