Como sucede en cualquier proceso electoral, los capitalinos ya observamos un paisaje repleto de propaganda de partidos políticos.
La imagen de candidatos o partidos, que quizá nunca habíamos visto antes, aparece en grandes lonas, carteles y otros materiales.
Las campañas están regidas por leyes, afortunadamente, las cuales debemos conocer para exigir que las organizaciones políticas no nos asfixien con su vulgar e inútil difusión.
Estos son los lugares en los que se puede y no se puede colocar propaganda electoral, según el Código de Instituciones y Procedimientos Electorales.