De acuerdo con el más reciente informe del Monitor de Sequía en México (MSM), publicado por la Comisión Nacional del Agua (Conagua), municipios de 15 estados del país sufren en diversos grados los estragos provocados por la sequía y en 271 de ellos —ubicados en Baja California, Oaxaca, Yucatán, Chiapas y Guerrero— el fenómeno se agudiza.
En 2 de los 5 municipios de Baja California afectados —detalla el informe dado a conocer el 15 de agosto anterior— se registra la categoría más intensa de sequía, la extrema (D3), mientras que con sequía severa (D2) además de los restantes municipios de esa entidad se reportan 37 en Yucatán, diez en Veracruz, cinco en Chiapas y dos en Guerrero.
En tanto, con 67 alcaldías afectadas Oaxaca es el estado con mayor número de municipios con sequía moderada (D1), seguido de Chiapas, que tiene 53; Yucatán con 43, Veracruz con 34 y Guerrero con 20.
Asimismo, del 31 de julio al 15 de agosto aumentó de 672 a 691 el total de municipios anormalmente secos.
En el mismo periodo el número de alcaldías afectadas por sequía de moderada a severa pasó de 251 a 311 en toda la República.
Lo anterior, precisa el reporte, se dio como consecuencia de que el sudeste del país vivió en julio el mes más seco de los últimos 75 años.
Afectaciones
Mientras poco más de la mitad del territorio de Quintana Roo se encuentra afectado por un ciclo de sequía anormal, señala el MSM, este año Yucatán enfrenta la peor sequía de las últimas dos décadas, lo que afecta en promedio entre 10 y 12% de la superficie cultivable, tanto de maíz como de sorgo, frijol, calabaza y hortalizas, según reportes de la Secretaría de Desarrollo Rural del estado.
La dependencia señala que la superficie cultivable de maíz de temporal asciende a 120 mil hectáreas y a 5 mil hectáreas la de siembra de hortalizas.
Con base en ello calcula que la falta de lluvias provocará la pérdida de casi 15 mil hectáreas, tanto de maíz como de hortalizas y sorgo, aunque precisa que dicha cifra podría ser mayor, lo cual se evaluará una vez que concluya el recuento de los daños.
El Centro Meteorológico de la Universidad Autónoma de Yucatán (UADY) indica al respecto que como producto de diversos fenómenos y cambios climatológicos y atmosféricos la península enfrenta modificaciones en sus temperaturas, de tal manera que 2015 se ha convertido en uno de los años más calurosos: los termómetros han alcanzado entre 40 y 41 grados centígrados y la sensación térmica llegó hasta los 45.
La Secretaría de Desarrollo Rural del gobierno de Yucatán anunció que para intentar paliar la situación de los productores gestiona la entrega de 30 toneladas de maíz para apoyar el autoconsumo, así como semilla de frijol y calabaza.
En ese estado la mayoría de las siembras de maíz son de temporal y se calcula que solo 15% de los agricultores cuenta con maquinaria para riego mecanizada.
Paralelamente, el periodo conocido como canícula, caracterizado por el intenso calor y sequía, dejó miles de hectáreas de maíz sin producir, al igual que para los cultivos intercalados, como la calabaza, yuca y jícama.
Entre los municipios más afectados por la temporada de sequía destacan Akil, Tixpehual, Tekax, Oxkutzcab, Santa Elena y Opichén, de la zona sur del estado, así como Valladolid, Tinum, Tixcacalcupul y Yaxcabá, en la zona oriente.
La peor
Casi 69% del territorio de Baja California presenta severas afectaciones por la falta de agua. De hecho, esta entidad, al igual que el estado norteamericano de California, enfrenta desde hace al menos cuatro años la peor sequía del último siglo.
Como producto de lo anterior la presa Emiliano López Zamora, enclavada en Ensenada y que abastecía de agua a gran parte de la península, ahora solo aloja verdosos charcos cuyo líquido resulta imposible de consumir.
Para el único estado del país con clima mediterráneo (solo llueve en invierno) las repercusiones han sido devastadoras en sus cinco municipios, principalmente en dos, los únicos catalogados actualmente con sequía extrema por la Conagua.
El municipio más afectado es precisamente Ensenada y zonas aledañas, como los campos agrícolas de San Quintín y el área vitivinícola Valle de Guadalupe.
La escasez de agua ha reducido el desarrollo económico de la región y genera problemas de salud debido a la prolongada sequía que afecta a varias demarcaciones de la entidad, por lo que el pasado 15 de agosto el Senado de la República exhortó al gobernador Francisco Vega de la Madrid a atender urgentemente el desabasto de agua y sequía.
Guerrero
La ausencia de lluvias en Guerreo provocó que se perdiera casi 80% de la siembra de maíz, por lo que la producción, que el año pasado fue de 2 millones de toneladas, esta vez apenas alcanzaría 400 mil.
Rigoberto Acosta González, titular de la Secretaría de Desarrollo Rural (Seder), manifestó que el mayor desastre agrícola en el estado se produjo en los municipios de Altamirano, Coyuca de Catalán, Zirándaro, Ajuchitlán del Progreso, San Miguel Totolapan, Arcelia, Tlapehuala, Tlalchapa, Cutzamala y Altamirano, donde se siembra maíz en aproximadamente 57 mil hectáreas.
Frente a esta situación, el gobierno del estado solicitará a la Secretaría de Gobernación (Segob) que declare a la región de Tierra Caliente como zona de desastre, en tanto la Sener sostuvo una reunión con los productores agrícolas y ganaderos —estos últimos igualmente afectados por la sequía— para recabar información sobre los daños en los cultivos y las cabezas de ganado y que de esta manera el gobierno federal, por medio del Fondo Nacional de Desastres (Fonden), instrumente un plan de apoyo a los campesinos y ganaderos del estado que resultaron afectados.
La finalidad es que los gobiernos estatal y federal enfrenten la crisis alimentaria que se avecina en Guerrero como consecuencia de la pérdida de la mayor parte de la cosecha de maíz en las siete regiones de la entidad.
Acosta González reveló que la pérdida de la cosecha en 68 mil 867 hectáreas siniestradas por sequía se dio en 474 comunidades, mientras que el número de
agricultores afectados asciende a 31 mil 477.
Oaxaca
El fenómeno de la canícula —que se presenta entre julio y agosto— provocó afectaciones en al menos 100 municipios de las regiones de la Cañada, Costa, Istmo de Tehuantepec, Mixteca, Cuenca del Papaloapan y Valles Centrales en Oaxaca.
Sobre el particular, la Secretaría de Agricultura, Ganadería, Desarrollo Rural, Pesca y Alimentación (Sagarpa) explicó que la “sequía de agosto” o “veranillo” —que representa los 40 días más calurosos del año— afectó 43 mil 276 hectáreas de maíz, frijol, sorgo, café y otros cultivos en ese estado.
Las altas temperaturas y la falta de lluvias provocaron que decenas de hectáreas sembradas de maíz resultaran afectadas, pues las milpas no alcanzaron su etapa de floración, el intervalo de tiempo más importante en su crecimiento. Este desastre agrícola pondrá en predicamento a miles de familias que dependen del temporal para obtener su cosecha.
Las dependencias federales y estatales disponen del Fondo de Apoyo Rural por Contingencias Climatológicas por 136 millones de pesos para ofrecer apoyos a productores ante afectaciones por desastres naturales.
En el caso de las afectaciones en los cultivos de maíz, cada productor recibirá mil 500 pesos por hectárea.
Déficit
La ausencia de lluvias en el presente ciclo agrícola continuó el mes pasado: según informa el Servicio Meteorológico Nacional, la precipitación el mes anterior ascendió en el país a 107.7 mm, es decir, 31.4 mm por debajo del promedio histórico de ese mes, y se situó como el décimo agosto más seco desde 1941.
Solo algunas regiones del centro, noroeste, noreste y la Península de Yucatán, explica, recibieron lluvias por arriba de lo normal durante el mes referido, mientras que el resto del país continuó con importantes déficit de precipitaciones.
Además, un canal de baja presión que se extendió desde el noroeste hasta el centro del país se combinó con entradas de humedad del Pacífico, generando lluvias que disminuyeron la condición anormalmente seca (D0) y sequía moderada (D1) en Sonora y Chihuahua.
La Península de Yucatán tuvo una ligera mejoría con la reducción de la sequía severa (D2) debido a la humedad producida por ondas tropicales; sin embargo, hacia el resto del sur, sudeste y occidente del país las precipitaciones fueron escasas, y como resultado se empeoraron las condiciones de sequía en Guerrero, donde apareció la sequía extrema (D3).
La sequía moderada y las condiciones anormalmente secas también se incrementaron en Chiapas, Tabasco, Veracruz, Michoacán, Jalisco y Nayarit, señala el organismo, mientras al noreste del territorio nacional se ubicó un sistema de alta presión, cuya circulación provocó altas temperaturas y ausencia de lluvias. Como consecuencia surgieron nuevas áreas con D0 y D1 en el norte de Coahuila, Nuevo León y Tamaulipas.