La Agencia de Investigación Federal (FBI) anunció que investigará el ataque para una clínica de discapacitados en San Bernardino, California, como un “acto terrorista”.
El representante del FBI en Los Angeles, David Bowdich, detalló que varias evidencias apuntan a que se trató de terrorismo, entre ellas conversaciones telefónicas con otras personas que ya están bajo investigación.
El funcionario agregó que hay pruebas de que los atacantes planeaban borrar sus huellas digitales, tras la revisión de un inmueble que ambos ocuparon, en el que además hallaron más de 3,000 municiones y material para hacer bombas.
La declaración ocurre luego de que medios trascendieran que Tashfeen Malick, quien atacó la clínica junto a su marido Syed Farook, juró lealtad al líder del Estado Islámico en una publicación de Facebook, en un perfil con otro nombre, según investigadores.
Los funcionarios citados agregaron además que aún no es claro si la organización terrorista ordenó el ataque, aunque las pruebas apuntan a que ésta sólo fue la “inspiración” para Farook y Malick.
En una conferencia posterior, el director general del FBI, James Comey, afirmó que las pruebas señalan que la pareja de asesinos no tenían vínculo con alguna célula del Estado Islámico.
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