Banco de México sube tasa de referencia a 7.50 por ciento

Busca reforzar la tendencia descendente de la inflación

Redacción
Política
Banco de México.
Foto: Especial

México, 8 de febrero. La Junta de Gobierno del Banco de México (Banxico) decidió por unanimidad aumentar el objetivo para la Tasa de Interés Interbancaria a un día en 25 puntos base, a un nivel de 7.50%, para reforzar la tendencia descendente de la inflación.

Esta primera alza del año y segunda consecutiva estuvo en línea con lo esperado por la mayoría de los analistas, pero a diferencia de la Reserva Federal (Fed) de Estados Unidos, que el pasado 31 de enero mantuvo sin cambio su tasa de fondos federales.

En su primer anuncio de política monetaria de 2018, el banco central refirió que la inflación general anual presentó un repunte a finales de 2017, al alcanzar un nivel de 6.77% al cierre del año, pero en enero pasado la inflación general anual disminuyó a 5.55 por ciento.

No obstante, precisó, dada la posición cíclica en la que se encuentra la economía y al considerar los altos niveles que presenta la inflación, se podría dificultar la asimilación de los choques que la han afectado.

Por ello, es importante que la postura monetaria evite que dichos choques den lugar a efectos de segundo orden sobre el proceso de formación de precios de la economía, subrayó el Banxico.

Así, con el objeto de mantener una postura de política monetaria que persevere en el anclaje de las expectativas de inflación y refuerce la tendencia descendente de la inflación general anual hacia su meta, la Junta de Gobierno decidió por unanimidad aumentar el objetivo para la Tasa de Interés Interbancaria a un día en 25 puntos base a un nivel de 7.50 por ciento

En esta primera reunión de política monetaria del año, la Junta de Gobierno del Banxico sesionó por primera vez con sus cinco integrantes desde noviembre de 2017, pues ya participó Irene Espinosa, recién designada como subgobernadora y la primera mujer en ocupar este cargo.

El instituto central explicó que el repunte de la inflación a 6.77% al cierre de 2017 fue consecuencia de varios choques no previstos, entre los que destacan los aumentos en los precios de algunos energéticos, principalmente el gas L.P, y de ciertas frutas y verduras.

Además, una depreciación adicional de la moneda nacional y un aumento en su volatilidad, ante la incertidumbre asociada al proceso de renegociación del Tratado de Libre Comercio de América del Norte (TLCAN) y los efectos del aumento al salario mínimo, que entró en vigor en diciembre en lugar de enero.

No obstante, destacó, en enero de 2018 la inflación general anual disminuyó a 5.55%, en respuesta a una disminución tanto de la inflación subyacente, que pasó de 4.87% en diciembre a 4.56%, como de la no subyacente, que bajó de 12.62 a 8.44% en el mismo periodo.

Esto último, explicó, como consecuencia de que la inflación anual medida en enero de este año, ya no contiene el efecto de los aumentos de los precios de los energéticos registrados en el mismo periodo del año anterior, así como de las acciones de política monetaria implementadas por parte del Banxico.

Considerando el comportamiento reciente de la inflación, la evolución de sus determinantes, la postura de política monetaria actual y el horizonte en el que esta opera, apuntó se prevé que la inflación general continúe disminuyendo.

Así, a lo largo de este año se aproximará hacia el objetivo de 3% y alcanzándolo en el primer trimestre de 2019, fluctuando alrededor del objetivo durante dicho año.