Mientras la Selección Mexicana de Futbol da pena, tristeza y no despierta ningún ánimo de positivismo el golf de nuestro país —¡sí, el golf mexicano!— pone el ejemplo regalándonos resultados inesperados e históricos en el ámbito internacional.
Obviamente le reconozco a usted, querido lector, que me da mucha tristeza el hecho de que los medios especializados en deportes prefieren atiborrar de reflectores al equipo nacional de futbol que da vergüenza y pasarse por el arco del triunfo acontecimientos como los que ocurrieron hace unos días atrás en materia de golf.
Voy a hacerle a usted un breve resumen de lo que el golf mexicano nos regaló en las últimas semanas.
¡Primero las damas! Gaby López nos hizo brincar de emoción al ganar su primer título de la LPGA durante el torneo Blue Bay en la Isla Hainan, en China. La última vez que una golfista mexicana había ganado un torneo en la Ladies Professional Golf Association fue un 4 de octubre de 2009, cuando la gran Lorena Ochoa se llevó el Navistar LPGA Classic.
Me gusta el golf y tengo el placer de conocer a muchas y muchos golfistas, entre ellas a Gaby López, quien no ha tenido una carrera fácil entre lesiones y altibajos normales de la propia disciplina. Y es que debo apuntar que el golf es uno de los deportes más celosos que existen.
Le decía que Gaby le ha batallado, ha salido adelante de adversidades muy duras, que tienen que ver incluso con el aspecto familiar, pero ha sabido asimilar la ruta y salir adelante. Ahora somos testigos de una golfista madura a la que parece no frenará nadie. ¡Ojalá así sea!
Días después de la gran alegría que nos dio Gaby López, Abraham Ancer —nacido en Houston, Texas, pero criado en Reynosa, Tamaulipas— se llevó uno de los torneos más importantes de la PGA, el Open de Australia, que no es cualquier certamen puesto que existe desde 1902 y lo han ganado grandes exponentes del golf internacional como Arnold Palmer, Jack Nicklaus, Gary Player y Greg Norman, entre otros.
Con el título obtenido en Australia, Ancer además podrá participar nada más y nada menos que en el British Open del próximo año y eso no es tampoco cualquier cosa.
Afortunadamente la fiesta continuó en el golf mexicano porque posteriormente Isidro Benítez puso la cereza en el pastel: oriundo de Puebla y con tan solo 19 años ganó el Open de Argentina para convertirse así en el campeón más joven en la historia de la PGA Tour Latinoamérica y con ello, también, obtener la invitación para hacerse presente en el British Open de 2019. Ojo con este chavo que, con 15 meses como profesional, muestra un golf excepcional.
Razones del éxito
De pronto demandamos que nuestro país trascienda a nivel internacional, lo deseamos casi todo el tiempo y cuando ocurre resulta que todo lo que le conté anteriormente casi pasa desapercibido. Las portadas de los periódicos, luego de lo que hicieron nuestros golfistas en otros países, prefirieron darle lugar a otros temas que dan tristeza o risa (Selección Mexicana de Futbol). Pero, bueno, ¡para qué hago corajes! Es normal.
Mire, el golf de nuestro país atraviesa por un momento excepcional y quizás usted no ubica a los golfistas que mencioné pero se trata de deportistas con ganas de trascender, disciplinados y con enorme talento. Ellos, al igual que el resto, están siendo cobijados por una Federación Mexicana de Golf que trabaja muy bien; y no de ahora sino de hace tiempo. Las gestiones, por ejemplo, de Jorge Kahwagi Gastine, Pablo Suinaga y actualmente Jorge Robleda han sido brillantes con buena administración de recursos, incremento de los espacios para la práctica del golf, apertura de torneos nacionales que permiten a los amateurs desarrollarse de manera más eficaz y exitosa, entre otros puntos clave. Por todo ello ahora alcanzamos a disfrutar logros como los que le cuento. Y le digo que habrá más.