MEXICANOS DESAFÍAN PROCESOS CONVENCIONALES PARA SANEAR AGUA

Las nanoesponjas están hechas de grafeno blanco y representan una innovación mexicana.

Martha Mejía
Todo menos politica
Foto: Especial
Jukurae

Se prevé que para 2050 la demanda global de agua crezca más de 40% y que al menos una cuarta parte de la población del planeta viva una escasez crónica de agua potable: de ahí la necesidad de utilizar el recurso hídrico de una manera distinta a como se ha hecho hasta hoy.

Actualmente hay toda una gama de métodos para sanear y potabilizar el agua, que van desde los más tradicionales hasta los que utilizan lo último en tecnología.

De entre todas surge un método que proviene de los emprendedores mexicanos que dan vida a Tecnologías Ambientales de México (Tecam), un grupo de sinaloenses que lanzó un procedimiento para sanear cuerpos de agua contaminados con petróleo, a partir de la implementación de nanotecnología.

En entrevista José Humberto Ramírez Leyva, director y fundador, explica cómo surgió esta innovación mexicana en pro del medio ambiente: “Estudié Ingeniería Química en Cuestiones Ambientales en la Universidad de las Américas en Puebla. También hice una maestría en Ingeniería en Energía y Medio Ambiente en la Universidad de Calgary, en Canadá. Después realicé una estadía de investigación en la Universidad de Harvard y en el Tecnológico de Massachusetts”, dice.

Pero añade que fue durante su estadía en Calgary cuando, “como becario del Conacyt, junto con un convenio con Sener desarrollé esta investigación. Muchos becarios mexicanos fuimos a desarrollar tecnologías enfocadas al área de hidrocarburos. En lo particular desarrollé este material, que funciona muy fácilmente”.

Método

El método se basa en nanotecnología, es decir, nanoesponjas hechas de un material conocido como grafeno blanco, describe Ramírez Leyva.

“Cuando sucede un derrame de petróleo se acude al sitio, se dispersa el polvo que contiene las nanoesponjas, el material aglomera y absorbe el petróleo, y mediante un imán se remueve del agua fácilmente; de tal forma que luego de un tiempo se puede separar el petróleo del agua”, explica.

Apunta que una ventaja de esta tecnología es que el petróleo se puede reutilizar, mientras que las tecnologías existentes se enfocan a eliminar, degradar e inclusive quemar el petróleo al quitarlo del agua: “En cambio nuestra tecnología ofrece la oportunidad de recuperar ese hidrocarburo y poder utilizarlo para refinarlo y obtener gasolina, entre otros productos; de ahí la innovación”.

Señala que actualmente tramitan los permisos correspondientes para salir al mercado. “Hemos hecho varias pruebas de eficiencia en colaboración con la Universidad de Calgary. Se hicieron pruebas biológicas para ver que el material no fuera tóxico. Y se hizo una colaboración especial con la Universidad de Harvard, que se publicó en una revista científica norteamericana, donde se demuestra que el material es seguro y no solamente amigable para el ambiente sino que no afecta la salud”, comenta.

En este sentido añade que prevén que tanto las compañías petroleras como las autoridades de administración portuaria, que se encargan de dar el mantenimiento y la limpieza cuando sucede un derrame en puerto, sean sus primeros clientes potenciales para agregar al mercado esta gama alta de sus productos, fruto de la innovación mexicana.

Gama media

No obstante expresa que también desarrollan y comercializan una gama media que ayuda a sanear aguas residuales a fin de reutilizarlas para diversos fines.

“En nuestro producto de gama media usamos nanopartículas para tratar las aguas industriales, domésticas, municipales y negras. El procedimiento comienza cuando el agua negra o residual llega a un tanque, donde se ponen en contacto con nuestra tecnología que consiste en un precursor de nanopartículas cerromagnéticas y un agente oxidante: se hace una reacción físico-química que nos permite separar los contaminantes”, puntualiza.

Estos, agrega, se sedimentan y queda el agua limpia y el sobrenadante; el agua ya limpia pasa posteriormente por un proceso de filtrado; la calidad de agua que resulta del proceso cumple con todas las normatividades para ser reutilizada.

“Si bien no es para consumo humano sí cumple con la calidad que marcan las normas oficiales mexicanas de la Semarnat para poder reutilizarse y tener contacto indirecto con el usuario en usos como descargues sanitarios, limpieza en general y riego en áreas verdes, por ejemplo”, explica.

Indica que actualmente esta innovación funciona y algunos de sus clientes son principalmente agencias automotrices y de transporte.

Costos

Mientras que la gama alta todavía no tiene un costo fijo la gama media representa un ahorro significativo en términos económicos: “La gama media es un proyecto de economía de escala, es decir, entre más grande es la demanda es más económico. Por ejemplo, un metro cúbico de agua (mil litros) en el centro del país cuesta alrededor de 50 pesos, pero si se utiliza agua tratada con nuestro producto el costo es de 15 pesos, es decir, 35 pesos menos al usar agua tratada para empresas o negocios”, señala.

La empresa, que surgió en 2012 como creación de un grupo de jóvenes investigadores y emprendedores, ganó ya diversos reconocimientos, entre los que destaca el que otorga Cleantech Challenge México como una de las cinco empresas verdes más innovadoras del país al brindar soluciones reales para la limpieza del agua y su separación de hidrocarburos.