La diferencia entre superar el diagnóstico o fallecer se centra en la etapa en la que es encontrado el tumor, por lo que la detección oportuna es primordial.
Mediante la autoexploración regular de los senos es posible detectar a tiempo cualquier anomalía, mientras que adoptar un estilo de vida saludable, una alimentación adecuada, realización de ejercicio, evitar el tabaco, mantener un peso adecuado y acudir a realizarse anualmente una mastografía y ultrasonido de mamas después de los 41 años, son medidas que permiten una prevención y detección oportuna del cáncer de mama.
El cáncer de mama es una enfermedad ocasionada por el crecimiento acelerado, desordenado y descontrolado de células de la glándula mamaria, que de no detectarse y tratarse a tiempo puede causar la muerte.
De acuerdo con la Organización Mundial de la Salud (OMS) esta enfermedad afecta a mujeres a partir de la pubertad, por lo que la detección oportuna siempre es una oportunidad de vida.
Cifras de la Secretaría de Salud (SSA) refieren que en 2022 se registraron más de 15 mil casos de cáncer de mama en México y la mitad de ellas perdieron la batalla contra la enfermedad.
A nivel mundial se diagnosticaron 2.3 millones de mujeres con esta enfermedad y 685 mil fallecieron por esta causa.
La diferencia entre superar el diagnóstico o fallecer se centra en la etapa en la que es encontrado el tumor, por lo que la detección oportuna es primordial.
“Como mujeres la responsabilidad de iniciar nuestras revisiones médicas al respecto comienza desde la primera menstruación. Específicamente en el cáncer de mama; no se requieren mastografías desde ese momento, pero sí es clave iniciar la autoexploración en senos, axilas y pezón para corroborar que no hay anormalidades. Necesitamos protegernos ante el cáncer más frecuente y el más común en muerte de mujeres a nivel mundial”, comenta Mayra Galindo, directora de la Asociación Mexicana de Lucha Contra el Cáncer (AMLCC).
Diagnóstico oportuno
Mientras en Estados Unidos el diagnóstico temprano de la enfermedad alcanza 95%, en México la realidad es desafiante: solamente 60% de la población es diagnosticada en etapas iniciales. Esto significa que 40% restante ya ha alcanzado el estado de metástasis, un camino que lamentablemente lleva a peores pronósticos para las pacientes.
“Para poder tratar de forma correcta a una paciente con cáncer de mama es importante conocer la etapa clínica y el tipo de cáncer. Esto nos permite personalizar el tratamiento de una paciente, porque no todos los cánceres de mama se tratan de la misma forma”, explica la doctora Cynthia Villarreal, directora oncóloga médica del Centro de Cáncer de Mama del Tecnológico de Monterrey.
La especialista dice que “es muy importante entender cómo tratamos en la actualidad a una paciente con cáncer de mama y cómo se requiere personalizar cada caso, entender cuál es su riesgo y seleccionar los tratamientos específicos para cada una. El objetivo es evitar una progresión metastásica y aumentar el pronóstico de vida, ya que hoy este tipo de cáncer es el quinto lugar causante de muertes en mujeres en la mayoría de los países”.
Por su lado, la doctora Karina Cabal, vocera y asesora médica de la AMLCC, destaca que “como médicos debemos informar a la paciente con claridad y honestidad en cuanto a su padecimiento de forma humanizada mostrándole las diferentes opciones terapéuticas, pero también informándole acerca de las secuelas de los tratamientos y los servicios complementarios que requerirá para enfrentarlos”.
Añade que la nutrición, el apoyo sicológico, oncoimagen, cuidados paliativos y clínica del dolor son algunos de los servicios necesarios para un manejo adecuado durante el proceso.
Con la campaña nacional Que senos haga costumbre, se busca reforzar el mensaje sobre la importancia del autocuidado de la salud los 365 días del año, adoptar estilos de vida saludables como una alimentación adecuada, realizar ejercicio, disminuir el consumo de tabaco y alcohol, mantener un peso adecuado, además de promover la autoexploración regular de los senos para detectar cambios anormales, así como la realización de estudios de detección temprana y disminuir los factores de riesgo.
Autoexamen de mamas
“Para reconocer muchos de los signos de cáncer de mama primero hay que saber qué es lo normal en cada mujer. Por eso son importantes los autoexámenes de mama. Es el momento de revisar tus senos y notar qué se ve y qué se siente normal para ti. Esto es muy importante, ya que cada vez hay más mujeres jóvenes diagnosticadas con cáncer de mama”, dice la doctora Arthy Yoga, oncóloga quirúrgica de mama en el Hospital Houston Methodist.“Para la mayoría de las mujeres es recomendable una mamografía de detección a los 40 años, pero estamos viendo que a más mujeres de 30 años se les diagnostica cáncer de mama. Esto significa que sigue siendo importante hacerse autoexámenes de mama de vez en cuando y consultar a tu médico si sientes que algo anda mal”, refiere la oncóloga.
Si bien el dolor de mama es una razón común por la que las personas se preocupan por el cáncer de mama, la mayoría de los casos de malestar son en realidad benignos y no están asociados con el cáncer. Pero de las señales que sí deben alertar son: secreción con sangre del pezón, sentir una masa en el seno, hinchazón y enrojecimiento, hoyuelos o hendiduras del pezón o en el seno y cambios bruscos en el tamaño de un seno, expone la especialista.
¿Cómo se hace un autoexamen de mamas?
Completa los siguientes pasos mientras estás de pie y acostada:
Utiliza siempre la mano opuesta para revisar cada seno, es decir, la mano derecha en el seno izquierdo y la mano izquierda en el seno derecho.
Coloca tu mano plana y usa tus dedos para completar un movimiento de barrido comenzando en la clavícula hacia el pezón con una presión agradable y firme.
Luego barre todo el recorrido hacia el pezón desde la parte exterior del seno hasta el pezón.
Revisa la areola, que es el anillo de piel pigmentada que rodea al pezón.
La autoexploración puede realizarse una semana antes o una semana después del periodo menstrual.
Fuente: Hospital Houston Methodist