A 60 días de que se registró en México el primer caso de infección por el SARS-CoV-2, que provoca la pandemia de COVID-19, y a pesar de que las autoridades sanitarias implementaron una serie de medidas como distanciamiento social, higiene y lavado de manos, cuarentena, restricción de movimiento, uso de cubrebocas y Jornada Nacional de Sana Distancia con el fin de que la curva del coronavirus no se elevara en forma drástica, de manera irremediable el país arrancó la Fase 3 de la epidemia.
En esta etapa se vislumbra un aumento acelerado del número de personas afectadas y hospitalizaciones por casos graves.
Se trata de la más intensa de seis etapas, según anunció el subsecretario de Salud, Hugo López-Gatell, quien sin embargo precisó que existe la posibilidad de que algunas zonas del país regresen progresivamente a sus actividades laborales y escolares a mediados de mayo, en especial aquellas comunidades donde la presencia del coronavirus hoy es mínima o nula.
El estratega sanitario advirtió que de acuerdo con proyecciones de diversos modelos matemáticos elaborados por investigadores y científicos, la pandemia por COVID-19 podría generar en el país hasta ocho mil muertos.
Por ello insistió en señalar que si la población mexicana cumple con las medidas de aislamiento y suspensión de actividades se podría evitar un impacto mayor en el número de personas afectadas, pérdida de vidas, así como la saturación en el sistema de salud y la atención hospitalaria.
López-Gatell mencionó que dicha valoración matemática revela que alrededor de 250 mil personas podrían resultar enfermas de coronavirus, de las que entre doce mil y 15 mil tendrían que ser intubadas y ocho mil lamentablemente perderían la vida.
Y agregó que justo en la primera semana de mayo se prevé que se alcanzará el punto máximo de contagios y decesos por COVID-19, por lo que se exhorta a la población a cumplir con las medidas de higiene y sana distancia.
Ante la inexistencia de una vacuna contra el coronavirus y el difícil acceso a terapias efectivas para todos los casos, el epidemiólogo de la Secretaría de Salud dijo que existen otras alternativas que podrían contribuir a la reducción de posibles brotes de contagio, como la llamada “inmunidad de rebaño”, misma que podría generarse a partir del contagio, mas no necesariamente de la enfermedad, de hasta 70% de las poblaciones del mundo. “Si, y solo si, este virus produce inmunidad permanente podríamos acumular un número suficiente de personas inmunes, que no se pueden reinfectar: si alcanzamos 70% de las poblaciones del mundo con inmunidad, esto haría menos posibles brotes, aunque seguirían casos esporádicos en 30% restante”, precisó e subsecretario de Salud.
En este marco el presidente Andrés Manuel López Obrador descartó “el toque de queda” como medida para evitar la propagación del coronavirus. Por el contrario expresó que se mantienen las medidas de mitigación que se dieron a conocer desde el pasado 19 de marzo. Y aclaró que no se ejercerá la fuerza pública ya que va contra la ley.
El mandatario pidió al pueblo de México mantener la sana distancia para evitar más contagios y respecto de lo que se espera en las siguientes semanas de la epidemia reiteró que “estamos preparados para enfrentar los tiempos más difíciles”.
López Obrador exhortó a continuar con la disciplina y comentó: “Ya falta poco para salir de esta pandemia. No ha habido afortunadamente ningún descontrol. Todo se presenta de acuerdo a lo previsto, de acuerdo a lo que han proyectado los técnicos, los especialistas. Y estamos preparados para enfrentar los tiempos más difíciles”.
Aseveró el jefe del Ejecutivo que “esto va bien, pero lo que hemos logrado ha sido por el apoyo del pueblo, por el comportamiento ejemplar de los mexicanos. Ya se ha dicho muchas veces, desde el principio, que esta epidemia no se curaba solo en los hospitales sino además en las casas. Que lo íbamos a vencer todos juntos, como lo estamos haciendo”.
En este escenario el Sistema Nacional de Salud cuenta ya con cinco mil 59 camas, de las cuales mil 283 se utilizarían para los pacientes críticos. Y conforme aumente la demanda diversos hospitales entrarán al Modelo de Reconversión, es decir, se adaptarán para que solamente atiendan a personas afectadas por el coronavirus. Hasta el momento en el Seguro Social (IMSS) existen 184 unidades habilitadas, en el ISSSTE un total de 37, además de seis institutos y hospitales de la SSA, cifras que subirán conforme se eleve la demanda de atención médica.
A este arsenal de infraestructura hospitalaria se sumó recientemente el hospital temporal que se construyó en 21 días en el Centro Banamex de la Ciudad de México. Con el apoyo de 16 fundaciones y empresas el lugar se habilitó para instalar 234 camas con oxígeno, ocho camas de terapia intermedia, farmacia, áreas de descanso y alimentación para el personal de salud y todos los servicios necesarios para atender a pacientes con COVID-19.
No flexibilizar medidas
Mientras en países como Alemania, Dinamarca, Australia, Noruega y República Checa empezaron a revertir el aislamiento y en forma gradual inician el retorno a sus actividades normales.
Esta situación no tiene muy tranquilo al secretario general de la Organización Mundial de la Salud (OMS), Tedros Adhanom Ghebreyesus, quien advirtió que “lo peor aún está por venir” en la pandemia por coronavirus, en un mensaje dirigido a los gobiernos que empezaron a flexibilizar las medidas restrictivas.
“Prevengamos esta tragedia. Confíen en nosotros. Lo peor aún está por venir. Es un virus que muchas personas aún no entienden”, indicó el representante del organismo internacional, ante el avance de la pandemia que ya afecta a más de 2.6 millones de personas y ha provocado la muerte de por lo menos 180 mil, según cifras compiladas por la Universidad Johns Hopkins hasta el cierre de esta edición.
El representante de la OMS recordó además que la pandemia avanza en América Latina y África, donde teme se presente el peor panorama debido a que los sistemas de salud son menos desarrollados y con mayores carencias de infraestructura e insumos médicos. “Ahora tenemos tecnología, podemos prevenir este desastre, podemos prevenir la crisis”, añadió.
Aprovechó para desmentir informaciones falsas en relación a que el SARS-CoV-2 es un patógeno creado en un laboratorio y aseveró que su origen es animal.
De igual forma la vocera del organismo, Fadela Chaib, aclaró que “toda la evidencia que tenemos sugiere que el virus tuvo un origen animal y no sufrió manipulaciones genéticas. Muchos investigadores han podido analizar las características genéticas del virus y no han encontrado indicaciones que apoyen la idea de que el virus se haya construido en un laboratorio. Hay muchos expertos trabajando en el origen del virus, todavía no conocemos la fuente inicial, pero todo apunta a su origen animal y que no fue ni manipulado ni construido en un laboratorio o en algún otro sitio. Esta es la posición de la OMS como una organización que se basa en la ciencia”.
Vacunas y terapias
Investigadores trabajan contrarreloj en la búsqueda de una vacuna efectiva contra el coronavirus en países como Alemania e Inglaterra, donde están ya en fase de ensayos clínicos en humanos.
Con apoyo del laboratorio alemán BioNTech y Pfizer, los ensayos se encuentran en una etapa importante para que el biológico esté pronto disponible. El objetivo es determinar la tolerancia general de la vacuna puesta a prueba en 200 voluntarios sanos de entre 18 y 55 años de edad y su capacidad para dar una respuesta inmunitaria contra el agente patógeno, un virus tipo ARN que tiene la particularidad de mutar.
Ugur Sahin, presidente de BioNTech, aseguró que empezarían a finales de abril. Los primeros datos podrían estar disponibles a finales de junio o principios de julio. De igual forma Pfizer espera autorización para poner en marcha ensayos en Estados Unidos.
En Londres, en específico en la Universidad de Oxford, se realizan ensayos con una primera dosis administrada en 510 personas voluntarias; la mitad de ellas recibirán la vacuna y el resto placebo. En forma paralela se producirán un millón de vacunas para que en caso de éxito se distribuyan de forma inmediata. Los investigadores estiman que las probabilidades de que funcione son de 80 por ciento.
Cabe destacar que los 193 integrantes de la Asamblea General de la ONU adoptaron por consenso una resolución para el “acceso equitativo a las futuras vacunas” contra el COVID-19. El texto, que se centra en la respuesta sanitaria, fue propuesto por México y pide “reforzar la cooperación científica internacional para combatir el COVID-19 e intensificar la coordinación, incluyendo al sector privado”.
Científica mexicana
En caso de que el virus vuelva a circular el próximo año el número de infecciones disminuirá ya que tal vez más de 50% de la población habrá estado en contacto con este patógeno. “Y si para ese momento existe una vacuna se podrá proteger a las personas; esto nos lleva a considerar que las actuales medidas de confinamiento no se repetirán a causa del COVID-19”, dice Rosa María del Ángel, del Departamento de Infectómica y Patogénesis Molecular del Cinvestav.
De acuerdo con la investigadora, como sucede con otros coronavirus que generan gripes de manera anual, el SARS-CoV-2 estará presente año con año. Por el momento, al tratarse de un nuevo virus, el riesgo de infección es alto para todos. De ahí la importancia de mantener las medidas de distanciamiento social e higiene especificadas por la autoridad sanitaria.
Actualmente no existe un medicamento específico para eliminar la infección, pero con el fin de tratar de inhibirla se utilizan algunos fármacos que se usan para curar otros padecimientos, tales como la hidroxicloroquina (malaria y lupus) o ivermectina (antiparasitario). Este último ha sido probado in vitro con resultados positivos, aunque se desconoce su efectividad en vivo.
Del Ángel señala que el desarrollo de un medicamento dirigido a este virus tomará tiempo porque son varias las etapas que conlleva. De manera general en la fase preclínica se deberán hacer las pruebas a nivel de laboratorio en células en cultivo y con modelos animales; después vendrá la fase clínica en humanos. En esta se tendrá que determinar la dosis necesaria del compuesto para atacar al agente infeccioso sin causar toxicidad en el organismo.
Recalca que la investigación científica contribuirá al entendimiento de este virus y podría llevar a obtener una vacuna en el corto plazo, así como al diseño de medicamentos eficientes. “Una vez que el pico de la epidemia haya pasado y se hagan más pruebas será posible saber cuántas personas estuvieron infectadas, aun sin presentar síntomas, mientras que los estudios clínicos brindarán datos de la evolución de los pacientes en relación a los tratamientos aplicados”, expone la especialista del Cinvestav.
Salud mental
Se estima que entre 45 y 50% de los mexicanos que se encuentran en aislamiento físico podrían presentar el Síndrome de Cuarentena, que consiste en presentar una serie de reacciones emocionales en respuesta al estado de aislamiento: frustración, aburrimiento, nerviosismo, tristeza, irritabilidad, ira, confusión, insomnio y agotamiento emocional.
A escala mundial la tasa es de 30 a 35%, pero en la población mexicana es mayor debido a que “somos más sociales y más amigueros”, explica Bernardo Ng Solís, presidente de la Asociación Psiquiátrica Mexicana.
El porcentaje de casos se eleva en el personal sanitario porque, de acuerdo a un estudio realizado en China, hasta 75% de los trabajadores de la salud que estuvieron en la primera línea de atención presentaron síntomas de estrés, de 40 a 50% tuvieron síntomas de ansiedad y entre 40 y 50% síntomas de depresión.
El especialista en salud mental advierte que en general “la gran mayoría de las personas no desarrollarán alguna enfermedad mental sino la minoría” y explica que eso ocurrirá sobre todo en personas que previo a esta situación ya presentaban alguna condición siquiátrica, lo cual se puede exacerbar con la contingencia.
Gabriela Cámara Cáceres, presidenta honoraria de Voz Pro Salud Mental, detalla que en el caso de “los pacientes siquiátricos estables que siguen su tratamiento, a la mayoría les va a ir bien. Habrá individuos que no se reconocen como enfermos mentales y sí podrán desarrollar una enfermedad mental”. Y agrega que pueden presentarse secuelas sicológicas por la situación, como estrés postraumático, sobre todo en aquellos que hayan estado en riesgo de muerte.
Describe que las reacciones normales al confinamiento, y más si este es prolongado, serán ansiedad, temor, irritabilidad, agresividad, apatía e incredulidad, y advierte que la cuarentena puede derivar en un “aumento de consumo de alcohol, tabaco o drogas, ya que puede ser un “detonante para aumentar el consumo de sustancias”.
Por último exhorta a “limitar la exposición a noticias, pero sobre todo a redes sociales, ello por las falsas noticias, lo que puede afectar mucho más”. Y señala que se debe “mantener con los hijos una rutina apegada a la vida normal, conservar horarios de alimentación, no tenerlos todos el día en pijama, poner horarios para hacer la tarea, programando horarios para diversión…”
Cuándo usar cubrebocas
Si utiliza el transporte público.
Si atiende a alguien en quien se sospeche la infección por el SARS-CoV2.
Si tiene tos o presenta estornudos.
Son eficaces si se combinan con el lavado frecuente de manos o con gel antibacterial.
Antes de ponérsela, lávese las manos o desinféctelas.
Asegúrese de que no haya espacios entre su cara y la máscara.
Evite tocarla mientras la usa; si lo hace, lávese antes las manos.
Cámbiela tan pronto como esté húmeda y no la reutilice si es de un solo uso.
Para quitar el cubrebocas solo tóquelo por atrás, no toque la parte delantera.
Deséchelo en una bolsa de plástico y lávese las manos.
Fuentes: OMS y gobierno de la CDMX
Medidas en la CDMX a partir del 23 de abril
Se cierran 20% de las estaciones del Metro, Metrobús y Tren ligero.
Se establecen medidas en coordinación con transporte concesionado y RTP para aumentar frecuencias y evitar aglomeraciones.
Hoy No Circula obligatorio para todos los vehículos, independientemente de su holograma (se excluye a taxistas, transporte de carga y personal sanitario).
Verificación exhaustiva de las empresas que no cumplan las medidas de la declaratoria de emergencia sanitaria.
No habrá toque de queda ni multas a personas.
Se apela a la conciencia, la responsabilidad y voluntad de las personas.
Lavado de manos
Las manos tocan muchas superficies a diario, pueden recoger el virus y, una vez contaminadas, introducirlo al cuerpo cuando nos tocamos los ojos, la nariz o la boca. Además podemos contagiar a otras personas y también puede transferirse a otros objetos como las manijas de las puertas, las mesas o los juguetes y, luego, llegar a otras manos. Por esta razón la OMS resalta que el lavado de manos con agua y jabón es una de las mejores formas de evitar el contagio. Esta acción ayuda a eliminar los gérmenes y virus que se alojan en las manos y debe realizarse con una duración de 20 a 30 segundos.