duda pensar en grande; es tener confianza en el futuro; en que la economía de nuestra nación gozará de cabal salud en los próximos años y que la iniciativa privada sería una gran aliada para cristalizar tal sueño. Ni de una ni de otra cosa tenemos certeza de que serán realidad pero, como usted y yo sabemos, los políticos son mucho de futurear y más cuando se acercan elecciones presidenciales.
Por lo pronto, ¡ya se dio el banderazo de salida! La Secretaría de Relaciones Exteriores (SRE) y el Comité Olímpico Mexicano (COM) anunciaron que México se postulará para organizar los Juegos Olímpicos de 2036 o 2040.
Es importante apuntar que, evidentemente, hay un sector político que impulsa la idea de postular a nuestro país para organizar Juegos Olímpicos y otro que claramente lo rechaza. Por ejemplo, Ana Gabriela Guevara, titular de la Comisión Nacional de Cultura Física y Deporte (Conade), asegura que tal idea solo propiciaría endeudar al país. ¡Y mire quién lo dice!
Ahora bien, eso de organizar eventos deportivos —más con los de carácter olímpico— normalmente deja muy mal parado al político mexicano. Y le doy un ejemplo.
México estaba postulado en una candidatura que lucía interesante para los Juegos Centroamericanos y del Caribe que se desarrollarían en 2026 y al final el gobierno actual decidió no firmar todas las cartas compromiso que aprobó en un principio y que se necesitaban para la candidatura. En otras palabras, primero quisieron quedar bien para ganar bonos y después se echaron para atrás.
¿Habría infraestructura?
Es cierto que el Comité Olímpico Internacional (COI) ha cambiado su postura sobre el tipo de Juegos Olímpicos que quiere. Por ejemplo, los juegos de París 2024 serán un poco más austeros, más en la calle, más cercanos a la gente, en fin, pero sigue siendo un evento muy caro para organizar.
Simplemente como antecedente: Tokio, capital de Japón, gastó más de 15 mil millones de dólares para organizar sus Juegos Olímpicos, que al final no resultaron ser negocio por temas de pandemia.
Por otro lado, decir que México tiene o tendría infraestructura suficiente para desarrollar unos Juegos Olímpicos en 15 años sería muy temerario de mi parte y creo que lo fue por parte de quienes anunciaron la postulación, quienes aseveraron que nuestro país cuenta con instalaciones suficientes y no es cierto. Ese pensamiento no se apega a la realidad.
Ninguna de las instalaciones deportivas que hoy tienen México o la capital del país cumplen con los estándares mínimos internacionales, ni siquiera las instalaciones de Guadalajara, que fueron el último gran evento en 2011 en nuestro país con los Juegos Panamericanos. Hoy no se tienen las condiciones para pensar en organizar tal evento y quien sabe dentro de 15 o 20 años.
En conclusión, esto de candidatear a México para las Olimpiadas de 2036 o 2040 va muy ligado a las elecciones presidenciales de 2024. Ya veremos si esto resulta ser una buena estrategia.
Por lo pronto, lo que yo veo son ganas de ganar simpatía y adeptos bajo una buena intención… que luce muy complicada de desarrollar.
Dato: podría ser el 30 de noviembre cuando se haga pública la creación de un consejo que impulsará la candidatura de México para esas Olimpiadas.