En esta nueva realidad la Comisión Permanente del Congreso de la Unión sesionó por primera vez en la historia de forma virtual por medio de la plataforma Webex Meetings y, ¿qué les cuento?, en el orden del día había 142 iniciativas y 539 propuestas de puntos de acuerdo. Los temas más recurrentes fueron el Covid-19 y la situación energética nacional.
Me detengo en el segundo punto ya que entre el mar de propuestas hubo una del PAN para solicitar la destitución inmediata de la secretaria de Energía, Rocío Nahle, y del director de Pemex, Octavio Romero, “por su incompetencia manifiesta”, además de Manuel Bartlett, director de la CFE, “por su manifiesta deshonestidad y corrupción”. ¿Qué opinan?
Quien expuso de forma extraordinaria fue la diputada del PRI, Dulce María Sauri, quien dijo que fue abuso de autoridad lo hecho por Nahle en el decreto sobre el sistema eléctrico ya que cambió las reglas del juego. La electricidad costará más cara para todos y el acuerdo debe dejarse sin efectos de manera inmediata por contravenir la Constitución y la legislación en materia energética, la Ley Federal de Competencia Económica, así como diversos acuerdos y tratados internacionales.
Por cierto, dijo el diputado del PT Benjamín Robles, que el tamaño de la oposición es el tamaño de sus iniciativas. Solo le recordamos que gracias a esos 13 legisladores de oposición se frenaron los superpoderes que se le querían dar al presidente en materia presupuestal, así que se mordió la lengua.
Candidatea a Nahle
Ya les informaba que Nahle destruía inversiones y confianza en el país pues, saltándose la Constitución, las leyes y los tratados, sin ética alguna, publicó un acuerdo que le da facultades discrecionales a la Sener para desplazar a los privados y generar energía limpia en México. Con lo cual, además, los precios de la luz aumentarán drásticamente y la contaminación ambiental, porque entrará preferentemente la energía de CFE, más cara y contaminante. De hecho el titular de la Conamer prefirió renunciar.
Lo que me llamó la atención es que el Partido Verde —sí, su aliado con el cual hicieron a los contribuyentes parte del crimen organizado, quienes le avalaron desaparecer el Seguro Popular o las estancias infantiles o echar para atrás la reforma educativa— no dijo NADA. Sus compañeros del sexenio en contra de las energías limpias y ellos en modo silencio. ¡Pero son el quesque Partido Verde! Fue hasta el lunes que postearon en Twitter un mensaje que decía: el PVEM respeta la decisión del gobierno federal, toda vez que responde a un acto que se encuentra facultado a ejercer. ¡Quiúbole! Qué vergüenza, qué acomodaticios… bueno, de ese pie siempre han cojeado.
Estilo mata carita…
Con la novedad de que en la CDMX habrá semáforo rojo hasta el 15 de junio; o al menos eso prevén, pues ya ve que no se ha aplanado la curva de contagios y muertes por Covid-19 como lo estimaba el subsecretario Hugo López-Gatell, a quien aún no le cuadran los números.