MUERTE LENTA EN LA CDMX

“Una plaga que traerá consecuencias ambientales”.

Lourdes Mendoza
Columnas
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Uno de los distintivos de la CDMX son sus palmeras, pero podría dejar de serlo en poco tiempo porque un hongo patógeno del género Serenomyces está acabando con ellas.

Son originarias del norte de África. Fueron traídas a la ciudad durante el sexenio de Miguel Alemán, entre 1946 y 1952. Desde entonces se han adaptado bien al clima templado de la ciudad, aportando amplios beneficios como mejorar el suelo generando hojarasca, retener humedad, regular el microclima, evitar erosión, dar refugio y alimento a la fauna, etcétera.

La alcaldía Miguel Hidalgo, entonces de Víctor Romo, contrató a la empresa Bioforestal Innovación Sustentable, de Texcoco, para realizar un censo de palmeras y un diagnóstico fitosanitario, el cual determinó que existe presencia de patógenos no reportados para palmeras en México; hay además alta severidad de afectación y, lo evidente, elevada mortalidad de palmeras.

El censo se realizó en una superficie de 539 hectáreas correspondientes a las áreas verdes urbanas de Miguel Hidalgo; en total se evaluaron tres mil 257 palmas, siendo seis colonias las más pobladas: Lomas de Chapultepec (399), Bosques de las Lomas (337), Polanco Reforma (291), Chapultepec Morales (Polanco, 271), Lomas de Sotelo (187) y San Miguel Chapultepec II (162).

El hongo ha matado 109 palmeras y ha dejado a otras 63 prácticamente condenadas. Esta plaga no solo cambia el panorama urbano, sino que además traerá consecuencias ambientales.

La situación deja muchas preguntas abiertas para la Secretaría del Medio Ambiente del gobierno de la CDMX y la alcaldía Miguel Hidalgo en los tiempos del morenista Víctor Romo: ¿por qué no hicieron nada?, ¿por qué pareciera que se hicieron de la vista gorda?

Quédate en México

Los que no quieren seguir haciéndose de la vista gorda son los estadunidenses al dar a conocer que regresa este polémico programa para las ciudades de San Diego, Brownsville y El Paso, colindantes a su vez con Tijuana, Matamoros y Ciudad Juárez, respectivamente.

Esto obliga a los migrantes, principalmente centroamericanos, a regresar y permanecer en territorio mexicano mientras autoridades estadunidenses deliberan sobre sus peticiones de asilo.

Lo dramático del caso es que en México no existe la capacidad para atender esta situación. Tan solo Human Rights First documentó durante el gobierno de Trump al menos mil 500 casos de asesinatos, violaciones, robos, secuestros, entre otros, en contra de migrantes en México mientras esperaban que se resolviera su petición de asilo para entrar a la Unión Americana.

Ahora que vuelve este polémico Quédate en casa el desamparo que les espera en México se agravará por el contexto de pandemia que vivimos.

Estilo mata carita

Para terminar, solo hacer eco del llamado que hicieron desde el senado de la República Kenia López Rabadán y Xóchitl Gálvez, así como otras organizaciones como Nariz Roja, volviendo denunciar que #NoHayQuimios para los enfermos de cáncer.