Doug Casey, que como apuntamos en la anterior entrega es un auténtico anarquista en su significado filosófico (opuesto a todo dominio artificial), afirma que “la idea misma de Estado es un fraude, como la creencia de que tener derecho a las libertades se debe a las constituciones y no es un derecho dado por Dios. Las constituciones son tan solo papeles arbitrarios (aparte del triste hecho de que todas son ahora más o menos letra muerta). Tienes derecho a las libertades porque son partes necesarias para ser una persona libre, no por lo que dice un documento político. Aunque la esencia del Estado es la coerción, a las personas se les ha enseñado a amarlo y respetarlo. La mayoría de la gente piensa en el Estado a la luz pintoresca de un libro de educación cívica de la escuela primaria.
“Ese ideal siempre ha sido una ficción perniciosa porque idealiza, desinfecta y legitima una institución intrínsecamente malvada y destructiva, que se basa en la fuerza. Como Mao dijo, el poder político sale del cañón de un arma. Pero las cosas han ido mucho más allá de eso. Ahora estamos en el Estado Profundo, concepto que se originó en Turquía, lo cual es apropiado, ya que es el heredero de los imperios bizantinos y otomanos, totalmente corruptos. El Estado Profundo se ha infiltrado en todo el tejido social. Sus hilos se extienden desde Washington hasta cada parte de la sociedad civil. Al igual que un cáncer con metástasis, ya no se puede erradicar fácilmente”.
Estiércol
“Yo solía bromear diciendo que no había nada malo en Washington que diez megatones no pudieran curar. Pero ya no digo eso. Principalmente porque ahora no es cierto. Lo que ahora se necesita son diez megatones en la capital y cuatro explosiones más iguales en un radio de diez millas. En muchos sentidos Washington se modela a sí mismo como Roma. Así es como un librepensador victoriano la describió: ‘Roma vivió de su principio hasta que la ruina lo miró a la cara. La industria es la única fuente verdadera de riqueza, y no había industria en Roma. De día, el camino de ida estaba abarrotado de carretas y arrieros, llevando a la gran ciudad las sedas y especias del este, el mármol de Asia Menor, la madera del Atlas, el grano de África y Egipto; y los carros llevaban de regreso solamente estiércol.
“El Estado Profundo controla la esencia política y económica de EU. Esto es mucho más que decir que no hay una diferencia real entre las alas izquierda y derecha del Partido Demopublicano. Es bien sabido por cualquiera que tenga algún sentido (es decir, por todos menos el votante promedio) que, aunque los republicanos dicen que creen en la libertad económica (pero no), definitivamente no creen en la libertad social. Y los demócratas dicen que creen en la libertad social (pero no), pero definitivamente no creen en la libertad económica”.
(The deep state is responsible for all economic turmoil, https://www.lewrockwell.com/2020/06/doug-casey/the-deep-state-is-responsible-for-all-economic-turmoil/).